Puesto que no es este un artículo de opinión, nos limitaremos a exponer de forma totalmente objetiva por qué UGT cree que España no debe abanderar la implantación del coche eléctrico y pese a la opinión de Gobierno y expertos opina que debemos asumir el papel de un país que “produce, pero no investiga”.
Preguntado durante una sesión de control al Gobierno, Pedro Sánchez afirmó hace unos días que “España necesita al coche eléctrico para mantener sus niveles de exportación”.
El presidente del Gobierno argumentaba sus declaraciones explicando que, a día de hoy, las fábricas españoles exportan el 80% de su producción. Teniendo en cuenta que entre nuestros principales clientes están países como Bélgica, Francia, Reino Unido o Italia que son países que encabezarán la prohibición de coches de producción en poco más de una década, es imprescindible que la industria se adapte a estos cambios.
“Si no se hace la esa transición ecológica en la industria, ¿quién va a comprar los coches fuera de España?”, preguntaba Sánchez.
La otra cara de la moneda la representa el sindicato de trabajadores UGT.
“Que España se ponga a la rueda”
El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, durante una intervención televisiva ha asegurado que “España no debe abanderar la implantación del coche eléctrico”. Y aunque ha utilizado como argumento el mismo dato que el presidente (que nuestras fábricas exportan el 80% de su producción) lo ha hecho en sentido opuesto.
Según Álvarez los altos niveles de exportación son una prueba de que la industria nacional “depende” de las multinacionales automovilísticas y que a estas “les molesta enormemente que un país en el que están para exportar abandere esta causa por delante de cualquier otro país”.
El líder sindical apuesta por “ser más prudentes” y que España “se ponga a la rueda del cambio en Europa”.
Pepe Álvarez se une a los que defienden que la fabricación del coche eléctrico requiere un 30% menos de mano de obra (aunque hay informes que aseguran que la movilidad eléctrica supondrá la creación de 200.000 puestos de trabajo en Europa).
“No tiene sentido que España aparezca capitaneando con la bandera que precisamente las multinacionales no quieren que se saque con la fuerza con que se está sacando, porque hay muy serias dudas de si el coche eléctrico va a ser la tecnología que efectivamente se imponga”, ha defendido Álvarez.
“El avance del coche eléctrico no va a depender de nosotros en absoluto”, afirman categórico el líder de UGT.
Periodista de cuándo se maquetaba con tipómetro (no, no hace tanto...). Toda una vida dedicada a escribir sobre cómo la movilidad cambia (para bien) la vida de las personas. Ahora, con enchufe
Qué lamentable que personas con tan poca formación, visión y, sobre todo, nula empatía ambiental, sigan ocupando cargos de responsabilidad en este sufrido país. Casi tan grave como lo que padecimos en su día con las sandeces pronunciadas por Rajoy, Mr y Miss Aznar, etc, sobre el calentamiento Global. Como ya dijimos en su día algunos críticos con este tipo de personajes: “este tipo de mensajes algún día podrían ser considerados como apología de atentado contra la humanidad”. Y deberían ser juzgados, como debieron serlo: la actuación de la ex alcaldesa Botella, cambiando los medidores de polución a lugares menos contaminados; o la retirada de subvenciones a las Renovables en que incurrieron los gobiernos de PSOE y del PP. Y no ha pasado nada. Pasados unos días, todo se olvida…
Esa clase de retrógrados son los que pilotaron la trancisión en España, que como no pudieron quitarle los privilegios a los franquistas por falta de testiculina, se dedicaron a robarle a la siguiente generación para que paguen los que ellos obtuvieron.
Este es otro ejemplo, España se descuelga de otra revolución industrial, con más paro, menor productividad, etc. para la siguiente generación, pero ellos ya han sacado lo suyo.
Y el que venga por detrás que arrie.
Muy escasa visión del futuro demuestra esta opinión. Los sindicatos también incurren en el error de la perspectiva cortoplacista. A revisar,…