Emilio Herrera, director de operaciones de Kia en Europa, ha concedido una entrevista a Auto Express en la que ha adelantado parte de sus planes eléctricos. Así hemos sabido que Kia prepara un eléctrico pequeño pensado para rivalizar con el Citroën Ami.
“Estamos estudiando la posibilidad de tener coches pequeños para el uso urbano”, ha dicho el director de operaciones de Kia en Europa, Emilio Herrera en una entrevista publicada por Auto Express.
Coches urbanos… y eléctricos porque según adelanta Herrera los planes de Kia pasan por lanzar un modelo de pequeñas dimensiones y propulsión cien por cien eléctrica. Un modelo llamado a plantar cara a otro ya conocido. “Este vehículo será 100% eléctrico; nuestro proyecto es lo que llamamos coches L6 y L7 en el sector, como es el Citroën Ami”, adelanta Herrera. “Es algo que estamos investigando y supone una alternativa al transporte público con un coste muy similar a éste”.
El rival del Citroën Ami que prepara Kia se podrá comprar o alquilar
Con este futuro coche eléctrico Kia quiere explorar no solo nuevos segmentos, sino nuevas vías de explotación. Es por eso que entre las opciones que valora no está solo la comercialización sino que priorizará el pago por uso que parece será una tendencia al alza en un futuro cercano.
“Puede ser un modelo de suscripción o un alquiler por una semana o un mes; ha de ser tan flexible como el transporte público”, adelanta Herrera. “Estamos planteando una suscripción mensual barata, el Ami es uno de los vehículos en los que nos hemos fijado”, afirma el jefe de Kia.
El Citroën Ami que servirá de referencia (y competencia) al futuro eléctrico de Kia está disponible mediante el pago de una cuota mensual del 19,99 euros (tras una entrada de 2.644 euros). También se puede conducir mediante la fórmula de movilidad compartida a través del servicio Free2Move del Grupo PSA. En este caso, hay que abonar 9,90 euros al mes más un pago de 0.26 euros por minuto.
Kia ha decidido lanzar al mercado su opción de carsharing al comprobar que la nueva normalidad que se plantea tras la COVID-19 reducirá el uso del transporte pública a favor de los servicios de modalidad compartida. También se prevé incrementará el uso del vehículo privado, pero incentivando que sean vehículos bajos en emisiones.
Periodista de cuándo se maquetaba con tipómetro (no, no hace tanto...). Toda una vida dedicada a escribir sobre cómo la movilidad cambia (para bien) la vida de las personas. Ahora, con enchufe
