- El primer híbrido enchufable de Omoda llega cargado de calidad y con un rendimiento cifrado en 535 CV
- Se puede adquirir desde 39.100 euros con descuentos y ayudas
No hay duda de que el aterrizaje de la dupla Omoda y Jaecoo en el mercado está siendo más que sonado, como bien demuestran las casi 2.250 unidades vendidas en mayo y que suponen un récord absoluto. Un éxito que se ha cimentado, como tiene que ser, a través de modelos de base, de corte económico y que lleguen tanto a la vista como al bolsillo del comprador.
Sin embargo, una vez realizado este desembarco ‘popular’, Omoda ha decidido subir varios puntos el nivel y mirar sin avergonzarse a los estratos más altos del mercado, es decir, las firmas premium. El protagonista, el Omoda 9 SHS que nosotros ya hemos podido conducir.
Omoda 9 SHS: atractivo en diseño
El Omoda 9 es un SUV, pero uno mucho más grande que el Omoda 5, ya que mide 4,77 metros de largo por 1,92 de ancho y 1,67 de alto. Cotas que le permiten poner el foco no solo en contendientes del corte del Kia Sorento, sino también de los Lexus NX, Volvo XC60 o de la terna alemana formada por el Audi Q5, el BMW X3 y el Mercedes-Benz GLC.
Dicho esto, el diseño podríamos decir que es una reinterpretación del visto en el Omoda 5, como se percibe en la calandra o en los pilotos traseros, pero tiene aspectos únicos como la firma lumínica diurna que le aporta anchura visual, las llantas de 20” ola doble luz de freno situada en el spoiler trasero. Del mismo modo, cuenta con una paleta de colores formada por cinco tonos, en los que el verde es exclusivo del lanzamiento y el único que tiene un sobrecoste de 800 euros es el gris mate, que le aporta ese toque de exclusividad.
Un interior de lujo para el Omoda 9 SHS
De puertas para dentro se respira calidad, con materiales de corte premium y ajustes muy notables aunque hemos percibido algunos puntos a mejorar como por ejemplo el propio tacto del cuero Napa de los asientos, las terminaciones del guarnecido del techo y sobre todo lo voluminoso que resulta la consola central. Sin salir de ella, aplaudimos gratamente que apuesten por mandos físicos para funciones como el climatizador y los modos de conducción, pero no han estado acertados a la hora de elegir el comando informativo en una zona superior, que incita a pulsarlo cuando solo es decorativo.
Del mismo modo, el sistema multimedia es casi el mismo que emplea su hermano pequeño, el Omoda 9, siendo visible a través de una pantalla de 12,3 pulgadas que se conecta con el cuadro de instrumentos con la misma diagonal bajo un mismo marco. Una decisión que tampoco nos parece acertada más aún cuando este coche pretende estar en una posición superior y, sobre todo, cuando hay otros modelos del grupo, como el propio Jaecoo 7 o el Ebro s800 que cuentan con una pantalla independiente que no solo le brinda más presencia, sino que ofrece un manejo mucho más rápido e intuitivo.
En el punto positivo, contamos con un Head-up display proyectado en el parabrisas que, además, suma la función de realidad aumentada, con flechas interactivas que ayudan al conductor. También ponemos en valor que el coche traiga de serie asientos calefactables y con función masaje, así como dos altavoces integrados en el reposacabezas del conductor. Por último, el Omoda 9 SHS es el encargado de estrenar el volante D-Shape con la parte inferior achatada que se irá integrando en el resto de modelos desde ahora.
¿Es amplio el Omoda 9 SHS?
Dado que hablamos de un coche de generosas dimensiones, es de esperar que cumpla en el apartado de la habitabilidad, y lo hace. Los 2,88 metros de distancia entre ejes contribuyen a ello y en su segunda fila de asientos tres adultos se pueden acomodar sin demasiados problemas, con la salvedad de que las rodillas ban demasiado flexionadas. Pero por hueco para las piernas y para la cabeza va más que sobrado, sobre todo gracias al ajuste de inclinación de los respaldos.
En cuanto al maletero, el Omoda 9 SHS mantiene la máxima de que los coches chinos están pensados para los ocupantes y aunque el volumen asciende a los 471 litros, sumando unas formas regulares, cuando lo comparamos precisamente con la terna de antes vemos que el NX parte de los 545 litros y el Sorento de los 604 litros (sumando además 7 plazas), siendo el XC60 el único que se queda por debajo en la declinación phev, con 468 litros.
Más potente que un 911 GT3 RS
Una vez que Omoda ha tocado ya los ‘palos’ de la gasolina y la total electrificación con el Omoda 5, en el que dentro de poco estará igualmente disponible la hibridación, la única tecnología que le faltaba por incluir era la hibridación enchufable que está presente en este Omoda 9 SHS, convirtiéndose en el primer phev de la marca y, ojo, en uno de los más potentes del mercado.
Porque la firma china ha echado el resto a nivel mecánico evolucionando el sistema SHS que ya hemos visto en los Jaecoo y Ebro pero subiendo varios puntos el nivel. Porque si bien partimos de la misma base, con el 1.5 Turbo de quinta generación desarrollado por el Grupo Chery con una eficiencia térmica del 44,5%, ahora sumamos no uno, ni dos, sino tres motores eléctricos para, según la marca, desarrollar una potencia conjunta de 537 CV y 645 Nm de par, o lo que es lo mismo, 12 CV menos que un Porsche 911 GT3 RS.
En este punto, seguro que muchos pensáis “sí, claro, pero en cuánto acelera porque claro, pesará una barbaridad”, y aunque no estáis desencaminados ya que cifra 2,2 toneladas (el GT3 RS se queda en 1.525 kg), el Omoda 9 SHS consigue una aceleración de 0 a 100 km/h de 4,9 segundos, una auténtica barbaridad.
Tanto es así, que la marca organizó una prueba de aceleración para demostrar su rendimiento y en los dos intentos que realizamos, el coche necesitó poco más de 16 segundos para cubrir los aproximadamente 900 metros de pista que teníamos a nuestra disposición (se realizó en un aeródromo) alcanzando en este tiempo los 180 km/h.
Así se comporta el Omoda 9 SHS
En esta prueba hubo varios detalles que nos parecieron curiosos. Primero, que con el modo Sport el programa de conducción EV sigue funcionando y segundo que hasta más allá de la mitad del recorrido son los motores eléctricos los que impulsan el conjunto, entrando poco después del gasolina y aportando todo el rendimiento al sistema.
Porque aquí hay varias matizaciones que colocan al Omoda 9 SHS como el buque insignia del Grupo Chery. Empezando por ese comentado potencial y siguiendo por una gestión del mismo curiosa, en la que los diferentes motores van funcionando de distinta manera según el programa de conducción escogido. Sin entrar en detalles más técnicos y menos atractivos, resumimos que en todos los programas los tres motores eléctricos priorizan su uso a excepción del Eco, que se mueve únicamente con trasero.
Antes de detallar la que es una de sus principales características, déjame igualmente que te cuente que, pese a su porte, el Omoda 9 SHS no desmerece para nada a la dinámica de conducción.
En el mismo aeródromo de la aceleración pudimos realizar un pequeño circuito de handling en el que se comprueba que la nueva suspensión activa hidráulica CDC, le sujeta de una manera más o menos estable y solo en momentos críticos, el coche tiende a cabecear en exceso. Lo bueno es que tanto el tacto del freno como de la dirección parecen haber mejorado frente al Omoda 5 e incluso la propia suspensión puede regular su dureza de manera manual a través de la pantalla.
A diario, sin ‘encender’ el motor de gasolina
Ahora bien, aunque el rendimiento está sobre el papel, este Omoda 9 SHS no es sino un híbrido enchufable y la característica que lo ha de definir es la eficiencia. La misma que nos encontramos en el ordenador de abordo al terminar la jornada de presentación y ver que incluso con todas las pruebas de aceleración y manejo realizadas en circuito cerrado, el consumo medio que estima el coche que hemos hecho combinando la electricidad y la gasolina es de solo 6,5 l/100 km.
Pero si encima lo desgranamos por tecnologías, el gasto podríamos decir que ha rondado los 3 l/100 km de gasolina y los 15 kWh/100 km de electricidad, es decir, muy sobresaliente. Esto se debe a que la gestión del sistema híbrido enchufable es muy buena, permitiendo al coche utilizar toda la electricidad que guarda en sus baterías.
145 km de autonomía eléctrica
Unas baterías de litio manganeso ferro fosfato (LMFP) desarrolladas por CATL que tienen una capacidad de 34,46 kWh y con las que el Omoda 9 SHS puede llegar a homologar hasta 145 km de autonomía eléctrica. Es decir, que si te lo montas bien, puedes llegar a estar hasta tres de los cinco días de la semana sin cargar el coche (teniendo en cuenta que la media diaria es de unos 50 km) y que cuando la batería se agota, en algo más de 10 horas, podrás tener el 100%.
Pero si necesitas un ‘chute’ de carga instantánea, el Omoda 9 SHS puede también conectarse a tomas de corriente continua de 65 kW, necesitando solo 25 minutos para pasar del 30 al 80%. Y además, incluye la función de carga bidireccional pudiendo sumistrar hasta 6,6 kW de potencia, el doble que un Jaecoo 7 SHS.
Coche premium, precio generalista
La guinda a todas estas cualidades la pone una tarifa que, como es habitual en los modelos del Omoda y Jaecoo, quiere buscar su máxima popularización. En este sentido, si bien el Omoda 9 SHS arranca en aproximadamente unos 53.000 euros sin descuentos, en el momento en el que se le empiezan a añadir descuentos comerciales, financiación y el Plan Moves, el precio se queda en 39.100 euros, es decir, menos incluso de lo que cuesta un Tesla Model Y e infinitamente por debajo de los que ha establecido como sus principales rivales.
Todo ello adherido además a un amplísimo equipamiento de serie, con la única opción de la comentada pintura mate, que desde Omoda confían en que sea la más popular, y a unos atributos generales más que satisfactorios que a buen seguro lo posicionarán muy bien dentro del mercado.
No era la idea inicial pero las cuatro ruedas se cruzaron en mi camino periodístico y desde entonces no he parado de disfrutar al volante. Enamorado del sonido de algunos motores, hoy por hoy vivo con sorpresa y emoción el camino electrificado que está tomando el sector.