Espacioso, cómodo y muy agradable de conducir. El Kia Soul EV es uno de esos coches en los que se siente el placer de la conducción. Sus 27 kWh de batería permiten una autonomía real de más de 150 kilómetros con cada carga que elimina buena parte de la ansiedad del conductor eléctrico.
Son sensaciones seguramente subjetivas y que cada conductor sentirá o no dependiendo de sus gustos. Es esa sensación de control absoluto de la conducción que yo al menos no sé explicar. No sé si será porque en el Kia Soul EV se viaja algo más elevado que en los turismos habituales, característica que nos gusta a algunos pero que puede disgustar a otros, o porque la banqueta del asiento está lo suficientemente alta como para no atormentar a las rodillas o por alguna otra razón etérea. En cualquier caso nada diferente a un Kia Soul de combustión, salvo, eso sí, la absoluta inexistencia de ruidos y vibraciones al conducirlo y la tranquilidad que transmite detrás del volante. Algo no tan etéreo.
Aspecto exterior
Después de explicar las sensaciones subjetivas, algo complejo siempre que se prueba un coche, vamos con algunos de los detalles que destacan en él. Kia ha presentado este modelo de momento en dos colores, blanco con el techo azul claro y azul oscuro con el techo blanco. Las llantas son exclusivas de este modelo, la parrilla delantera en la que se encuentra la tapa de recarga y los pilotos traseros led son las diferencias con el Soul “normal”. Hay algunos otros detalles como el reborde coloreado del spoiler delantero y las placas “Eco-Electric” de los laterales, Puede o no gustar estéticamente, eso también es subjetivo, pero lo que es cierto es que el interior está muy conseguido.
Aspecto interior
Porque es muy luminoso y amplio en todas las plazas. Gracias a las múltiples regulaciones de asiento y volante encontrar la posición de conducción es muy fácil y, tengo que confesarlo, una de las más cómodas que he logrado de todos los coches que he probado. Los espejos retrovisores exteriores grandes y de forma cuadrada ayudan también a tener claro que está pasando por detrás.
En la unidad de prensa que hemos tenido el equipamiento es abundante. Asientos de cuero y volante calefactados, navegador táctil de 8 pulgadas, cámara trasera y sensores de aparcamiento, espejo retrovisor electrocrómico, etc. En general los materiales son de buena calidad y están bien ensamblados. Hay mezcla entre inserciones de cuero y algunas zonas de plásticos quizás en algunos casos excesivamente duros, sobre todo en la parte alta de las puertas. Las botoneras son de plástico de calidad, bien ajustadas y no se aprecian holguras que puedan predecir un mal envejecimiento.
La ubicación de la batería no afecta a los asientos delanteros pero sí al suelo de los traseros. Al elevarlo la altura a la que quedan las rodillas es algo mayor de lo habitual, lo que puede incomodar algo a los pasajeros. El maletero no sufre modificaciones respecto al de un Soul convencional pero el falso fondo queda ocupado por un cajón en el que están los cables de recarga por lo que el volumen disponible es de 281 litros de los 354 disponibles.
El tablero de mandos es muy luminoso y se lee bien aunque la instrumentación, en algunos casos, no es tan exacta como sería deseable. De izquierda a derecha tenemos un potenciómetro en el que se indica una zona de carga, en azul, una zona eco, en verde y una zona blanca cuando se requiere mayor potencia. En su parte central se indica una estimación de la autonomía que, según Kia, tiene en cuenta el ciclo anterior de conducción, que no tiene un kilometraje fijo sino que se calcula a partir del uso que se le esté dando, si hay aceleraciones bruscas y el modo de conducción. Además tiene en cuenta el uso del freno regenerativo, la climatización y las cargas eléctricas adicionales (luces, sistemas electrónicos)
En el centro hay una pantalla de unas 4 pulgadas en tonos grises y fondo negro, en la que se puede visualizar el equipo multimedia, el flujo de energía y el ordenador de a bordo. Nos detenemos un momento en él puesto que, además de las distancias totales y parciales y la velocidad media hay un indicador de consumo medio e instantáneo excesivamente parecido al del Nissan Leaf. Tanto que comparte con él el error de marcar un consumo enorme cuando se levanta el pie del acelerador. Pero quizás el problema de esta barra indicadora es lo imprecisa que es. Tanto que para poder saber el consumo instantáneo es mejor buscarlo en la pantalla central del salpicadero, donde, escondido tras la información de la batería se puede encontrar la indicación del consumo instantáneo del motor, el climatizador y la electrónica. Esta indicación sí es precisa y bastante útil, con el inconveniente de ocupar la pantalla del navegador y no poder simultanear ambas informaciones. Es un pequeño inconveniente, que destacamos por lo importante que es en un coche eléctrico tener claros los consumos medios e instantáneos. A la derecha del todo tenemos un indicador de velocidad digital acompañado por una esfera que se ilumina según ganamos velocidad y que no aporta mucha información adicional.
La pantalla central del salpicadero es de 8 pulgadas y táctil. Reacciona muy bien al tacto y su funcionalidad es muy buena. En ella podemos ver las instrucciones del navegador y el equipo multimedia, además de incorporar funciones especiales para un coche eléctrico como los indicadores de consumo que mencionábamos antes, la información sobre estaciones de recarga o un mapa en el que se indica el alcance de la autonomía actual.
En esta pantalla también podemos ver la cámara de marcha atrás. Es un equipamiento útil porque la visibilidad trasera no es muy grande debido al pequeño cristal posterior. Hay que decir que las líneas que marcan las distancias en esta cámara no se mueven para mostrar la trayectoria que tomará el coche según la posición del volante, algo que suele ser bastante práctico y que las indicaciones de los sensores de aparcamiento las muestra la pantalla que hay detrás del volante, no la de la cámara lo que obliga a mirar a las dos pantallas a la hora de aparcar, algo complicado porque además el volante en muchos casos, al estar girando, oculta la información.
Haciendo honor a su nombre musical el marco de los altavoces delanteros puede iluminarse al ritmo de la música que sale por ellos o, si se prefiere algo más tranquilo, seleccionar que cambien de color lentamente o apagarlo, a través de un mando bajo el volante que también regula la intensidad de la luz.
Vídeo exterior e interior:
Características mecánicas
El motor eléctrico tiene una potencia de 82 kW (110 CV) que desarrolla 285 Nm. La aceleración de 0 a 100 km/h es de 12 segundos y puede alcanzar una velocidad máxima de 145 km/h. Está alimentado por una batería iones de litio de 27 kWh que consta de 192 celdas agrupadas en 8 módulos. Kia ha instalado un sistema de control térmico que permite mantenerla a la temperatura óptima de funcionamiento incluyendo además un aditivo electrolítico que reduce las fluctuaciones térmicas durante las distintas épocas del año.
Su autonomía homologada es de 212 kilómetros con cada carga. Esto supondría un consumo por cada 100 kilómetros de 12,7 Kwh. En nuestras pruebas, y tras realizar la carga completa de la batería, el indicador ha llegado a marcar una autonomía máxima de 164 kilómetros.
La garantía de la batería es de 7 años (sin límite de kilometraje durante los 3 primeros años) ó 150.000 kilómetros. En caso de que la capacidad de carga de la batería sea inferior al 70 % su reparación queda cubierta por la garantía.
Conducción
El puesto de conducción del Kia Soul es similar al de un coche automático convencional. Con el arranque sin llave lo único que hay que hacer es pisar el freno y apretar el botón POWER para que el coche se encienda y nos lo indique mediante la palabra READY en el tablero de mandos. Tenemos una palanca de cambios con las posiciones P, R, N, D y B. Esta última permite que, al levantar el pie del acelerador, el motor eléctrico se encargue de retener al coche, recuperando mayor energía que en la posición D. En cualquier caso al levantar el pie del acelerador las luces de freno se encienden para indicárselo a los conductores que circulan por detrás.
Además existe un modo ECO que se activa mediante un botón situado entre los asientos, que reduce la potencia del motor para incrementar la autonomía y que es recomendable utilizar en recorridos urbanos,
Ye en marcha inmediatamente se redescubre la experiencia eléctrica. El pisotón en el acelerador desencadena todo el par de manera inmediata por lo que la salida desde parado es muy buena. Alcanzar los 50 km/h es inmediato y llegar a los 120 no es algo que le cueste demasiado aunque es cierto que a partir de los 80 km/h es algo más perezoso, nada que pueda parecerse a falta de potencia.
Por la ciudad es un coche muy manejable, la posición elevada ayuda a controlar el movimiento del tráfico. Es estos recorridos es aconsejable utilizar el modo ECO y controlar la frenada en semáforos y bajadas cambiando las posiciones D y B, en función de la retención que se necesite. Salvo en frenadas muy bruscas el uso del freno es innecesario. Únicamente se necesita pisarlo para mantener el coche parado puesto que si no, debido al sistema de reptado, el coche avanza al levantar el pie del pedal del freno.
Circulando un poco más rápido la posición baja de la batería y sus 1.490 kilogramos de peso le otorgan un asombroso aplomo y circular por carreteras de curvas es una gozada, aprovechando la fulgurante salida de las curvas que le permite el par a bajas velocidades. Lástima que llegar a ellas con un coche eléctrico sea una labor algo complicada.
La dirección puede configurarse mediante un botón situado en el volante a las posiciones NORMAL, CONFORT Y SPORT. Junto con una correcta regulación de las suspensiones ambos sistemas transmiten correctamente y con eficacia lo que está pasando debajo de las ruedas del coche.
Vídeo conducción:
Consumos
Como siempre hemos realizado con este coche nuestro recorrido habitual que incluye tramos en autovía, carretera, puerto y ciudad, además de controlar el consumo total del uso diario que le hemos dado. En la tabla siguiente se muestran los resultados obtenidos.
Enlace a la planta y perfil del recorrido
El consumo medio obtenido ha sido de 14,5 kWh/100 km lo que supondría, con una batería de 27 kWh, 186 kilómetros de autonomía. Esta es la tabla comparativa con los modelos similares.
Enlace a la tabla completa de consumos
Climatización
El sistema de climatización del Kia Soul EV ha sido específicamente diseñado para este modelo. El sistema tradicional de resistencias ha sido sustituido por una bomba de calor que permite un consumo inferior de energía. Hemos podido calcular que con la temperatura a 22ºC el extra de consumo está entre 0,5 y 1 kWh más cada 100 km.
Esto es lo que nos han contado desde Kia sobre este sistema: “El Kia Soul EV lleva un sistema de climatización con bomba de calor, invirtiendo el ciclo del gas refrigerante del sistema de aire acondicionado convencional. El sistema también incluye una PTC de calefacción eléctrica para lograr unas condiciones de confort más rápidamente y en condiciones de frio más extremo”.
Con el uso de este sistema “se reduce el consumo energético a un 20% con calefacción y a un 7% con aire acondicionado. Además se usa el calor disipado por los sistemas electrónicos de control de motor eléctrico y batería, a través de un sistema de refrigeración líquido, mejorando el ciclo termodinámico del sistema bomba de calor”.
Existen además otras formas de ahorrar energía como la posibilidad de climatizar únicamente la zona del conductor y calefactar el volante y los asientos traseros y delanteros (estos también se pueden enfriar), que contribuyen a disminuir el uso de la calefacción. También se puede programar, durante la carga, la temperatura a la que queremos encontrarnos el coche cuando lo vayamos a recoger.
Recarga
Hemos realizado varias recargas utilizando los dos cables de que disponíamos. El primero para recarga tipo 2 mediante un cable con conector J1772 en el lado del coche y schuko en el lado de la pared (10 A-240 V-2,4 kW), Con este cable y la batería al 25 % la información de carga indicaba 11 horas para completar la recarga. Ambos cables son de serie en todas las versiones.
Con el segundo cable, tipo 3 con conector J1772 en el lado del coche y Mennekes en el lado de la pared, para recuperar el 60% de la carga, el indicador marcaba 3 horas (hasta 27A- 240 V-6,6 kW)
Existe la posibilidad, de forma opcional, de incorporar el estándar de recarga rápida en continua a 440 V, CHAdeMO que permite recuperar el 80% de la batería en aproximadamente media hora.
Durante la recarga tres luces azules muy luminosas sobre el salpicadero nos indican, en función de si parpadean o no, el estado actual del proceso, algo muy similar a lo que nos podemos encontrar en el Nissan Leaf.
Existe una aplicación que, a través del teléfono móvil, permita controlar la carga y programar la climatización de forma remota aunque, por el momento, únicamente funciona en el mercado coreano.
Vídeo recarga:
Equipamientos, precio y unidad de prueba
El Kia Soul EV se puede adquirir en dos versiones. El equipamiento de serie incluye control de estabilidad, encendido automático de luces (no de los limpiaparabrisas), mandos en el volante, navegador gps con pantalla de 8 pulgadas, cámara trasera, Bluetooth, elevalunas eléctricos en las cuatro puertas, control de crucero, llantas de aleación, luces diurnas y pilotos traseros led, acceso y arranque sin llave, volante calefactable, cargador a bordo de 6,6 kW y el sistema de climatización de las baterías.
La segunda versión, llamada CHAdeMO, se caracteriza por incluir este estándar de carga además de los retrovisores exteriores plegables, el espejo interior electrocrómico, los sensores de aparcamiento traseros y delanteros, las luces antiniebla y el tapizado en piel. La unidad de prueba que aparece en las imágenes y vídeos de este artículo es esta segunda.
Con la oferta actual de la marca de 5.000 euros la versión con carga rápida bajo el estándar CHAdeMO cuesta 35.790 €. Restándole los 6.500 € de ayuda del Gobierno y los 1.000 del Plan Pive, nos podríamos llevar a casa un Kia Soul EV con carga rápida por 23.290 €. Su precio es inferior al del Nissan Leaf Tekna, el más equipado, al del BMW i3 o al del e-GOLF de entrada a la gama y algo superior al del Renault Zoe (sin batería) y el e-up!. Estos precios incluyen las baterías en propiedad.
El coche se puede adquirir también por 13.990 €, 16.990 € la versión CHAdeMO, y financiar el pago de la batería mes a mes, durante 7 años, con una cuota de 99 euros. En cualquier caso no se trata de un alquiler sino de una financiación, pasando la batería a ser propiedad del cliente desde el primer momento. De esta forma igualan el precio de la versión de combustión y el comprador podrá calcular si el pago de los 100 euros al mes le compensa en comparación con su gasto habitual de gasolina.
Galería completa de imágenes del Kia Soul EV (1 de 2)
Galería completa de imágenes del Kia Soul EV (2 de 2)
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Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.
Lo acabamos de comprar, la versión sin chademoo y estamos encantados. La autonomía real me sale muy cercana a los 200 km, tengo un consumo medio de 13-13,3 kw/h. MIraba el zoe, pero con las baterías en propiedad es muy caro por el equipamiento que ofrece. El Soul le supera de largo y además es más alto, cómodo y espacioso. Hay que tenerlo en cuenta y probarlo si pensais en comprarlo.
Lo que no encuentro en ningún sitio, es: Con las baterías cargadas a tope, arrancar y pisar a fondo hasta la velocidad máxima del coche, y así hasta que se pare, ¿Cuántos km. ha recorrido?. Esto seguramente no lo habrá hecho ningún propietario, pero el fabricante estoy seguro de que sí, y no lo publica porque quiere vender el coche… En fin.
No creo que ese vaya a ser el uso habitual del coche. Con los fósiles tampoco se suele hacer, que yo sepa…
Es que vaya tontería, eso no se hace con ningún vehículo porque sería una tontería, lo que importa es lo que consume en su uso real