Por Ley, a partir del 1 de enero de 2023, todos los edificios residenciales de nueva construcción tendrán que tener preinstalación de puntos de recarga. Te contamos en qué consiste y qué ventajas aporta para la movilidad eléctrica
Aprobado el Real Decreto de modificación del Código Técnico de la Edificación (CTE), a partir del 1 de enero de 2023 todos los edificios de uso residencial privado, con más de 20 plazas de aparcamiento, tendrán que montar canalizaciones que sirvan como preinstalación de las infraestructuras de recarga para el 100% de las plazas de aparcamiento.
Para los edificios de usos distintos al residencial privado, con más de 10 plazas de aparcamiento, la norma exige canalizaciones que sirvan como preinstalación de las infraestructuras de recarga para el 20% de las plazas de aparcamiento, así como la instalación de un punto de recarga cada 40 plazas o fracción.
Ojo, en ambos casos, la norma es para edificios de nueva construcción.
Preinstalación de un punto de carga, en qué consiste
La preinstalación es la realización de canalizaciones, pasa muros y arquetas para preparar y facilitar la instalación posterior de puntos de recarga.
“Es preparar el terreno para el futuro, de manera que cuando alguno de los vecinos de la comunidad quiera instalar un punto de recarga en el garaje comunitario pueda hacerlo sin necesidad de hacer una preinstalación”, explican los expertos de CargaTuCoche.
La preinstalación de un punto de recarga de vehículos eléctricos en una comunidad de vecinos está regulada por la Ley de Propiedad Horizontal. También por la normativa ITC-BT-52, que es la encargada de establecer la manera en que estas instalaciones y preinstalaciones han de hacerse.
Ventajas de la preinstalación de recarga en un garaje comunitario
Varias son las ventajas que aporta la preinstalación de cargadores en un garaje comunitario.
La primera y más evidente es que elimina parte de los trámites a llevar a cabo cuando un vecino decide instalar un cargador en su plaza. Con preinstalación hecha tan solo tendrá que conectar el punto de carga al cableado del edificio con lo que no solo se reduce el trabajo, también la inversión (uno de los conceptos más caros en la factura de instalación de un punto de recarga es el cableado hasta la plaza de aparcamiento).
Además, un edificio con preinstalación de recarga será más atractivo para posibles compradores/alquiladores. Es por eso que los expertos aconsejan a las comunidades de vecinos que se planteen la opción de impulsar la preinstalación en sus garajes aprovechando que el Plan Moves III incluye subvenciones para estos trabajos.
Periodista de cuándo se maquetaba con tipómetro (no, no hace tanto...). Toda una vida dedicada a escribir sobre cómo la movilidad cambia (para bien) la vida de las personas. Ahora, con enchufe