- Los coches eléctricos chinos cuestan en China muchísimo menos de lo que pagarías aquí, pero el ahorro puede esfumarse al cruzar la frontera.
- Importar un coche chino es legal, pero requiere superar un auténtico circuito de obstáculos administrativos y técnicos.
- Lo que viene de China es un peligro real para las marcas europeas: tres de cada 10 las prefieren
En el mercado automovilístico mundial, China ha dado un volantazo difícil de ignorar. Los coches eléctricos chinos no sólo ofrecen tecnología puntera, también sus precios son tan bajos que parecen irreales para los estándares europeos. Pero, ojo, que lo barato puede salir caro si no se tienen en cuenta los trámites, costes ocultos y requisitos legales que implica llevar uno de esos modelos hasta nuestras carreteras.
En España, muchos se preguntan si pueden aprovechar esa diferencia de precio importando directamente un coche desde China. Y la respuesta corta es sí, se puede. Pero como todo en la vida, la realidad tiene bastantes más matices y trámites de los que imaginas.
¿Por qué los coches eléctricos en China son tan baratos?
En parte, el secreto está en cómo el gobierno chino ha empujado su industria de vehículos eléctricos como si fuera una prioridad nacional. Durante años, quienes compraban un eléctrico recibían generosas ayudas económicas. Aunque las subvenciones centrales ya expiraron en 2022, algunas ciudades como Shanghái todavía las mantienen. Esa política ha transformado el mercado y reducido drásticamente los costes de producción.
Además, los coches eléctricos chinos disfrutan de importantes beneficios fiscales. Por ejemplo, aquellos que cuestan menos de 41.000 dólares están exentos de pagar un impuesto del 10%. Esa ventaja, unida al poder de producción a gran escala de fabricantes como la marca BYD, ha permitido poner en circulación modelos ultracompetitivos. El BYD Seagull, por ejemplo, cuesta en China lo que aquí vale una bicicleta eléctrica de gama alta.
Sin embargo, estos precios no se trasladan fácilmente a Europa. En cuanto cruzan fronteras, los costes crecen como la espuma debido a aranceles, la logística y las homologaciones.
¿Puedo importar un coche eléctrico de China y conducirlo en España?
Legalmente, sí es posible comprar un vehículo en China y traerlo a España, pero necesitas cumplir con una lista de requisitos técnicos que no es precisamente corta. Lo primero es que el coche debe obtener la homologación europea, un proceso que garantiza que el vehículo cumple con todos los estándares de seguridad, emisiones, ruido y calidad exigidos por la normativa comunitaria.
Para ello, se realiza una inspección técnica, se revisa el certificado de conformidad (CoC) y, si hace falta, se aplican las modificaciones necesarias. Esto último puede resultar bastante caro, sobre todo si el coche no se diseñó originalmente para el mercado europeo.
Además de eso, hay que sumar los trámites aduaneros, los aranceles (que rondan el 10%) y el IVA del 21%. A esto se le añaden gastos como transporte marítimo, que puede llegar a los 7.000 euros, y otros costes administrativos, como tasas de matriculación y revisiones técnicas.
¿Merece la pena importar un coche eléctrico desde China?
El ahorro inicial puede resultar muy tentador, sobre todo al comparar precios con modelos similares vendidos en Europa. Además, hay modelos chinos que aún no están disponibles aquí, lo que puede suponer una ventaja para quienes buscan opciones distintas o tecnológicamente más avanzadas.
Sin embargo, también hay que ser realistas. Los costes añadidos, como la homologación (que puede superar los 3.000 euros) o la incertidumbre sobre el servicio técnico y la disponibilidad de repuestos, pueden hacer que el ahorro se esfume rápidamente. Y en caso de avería, puede que te veas buscando piezas por Internet durante semanas.
Otro aspecto delicado es la garantía. Muchos coches importados no tienen cobertura oficial en España, lo que te obliga a asumir los riesgos de cualquier fallo o defecto sin el respaldo del fabricante. A eso hay que sumarle los posibles problemas con las normas de emisiones europeas, que cada vez son más estrictas.
Claves si decides lanzarte a la importación
Antes de comprar, investiga a fondo. No todos los coches chinos pueden pasar la homologación europea sin adaptaciones importantes. Asegúrate de tener toda la documentación necesaria desde el principio: factura de compra, certificado de origen, ficha técnica, etc.
Coches eléctricos chinos por menos de 30.000 euros que ya puedes comprar en España
También es muy recomendable contar con profesionales que conozcan el proceso de importación de vehículos. Hay empresas especializadas que pueden ayudarte a evitar errores muy costosos y garantizar que todo el procedimiento se hace conforme a la ley.
Y sobre todo, haz números. Calcula cada euro desde el precio de compra hasta la matriculación en España, incluyendo transporte, aranceles, IVA, homologación y posibles adaptaciones técnicas. Sólo así podrás saber si realmente vale la pena o si es mejor esperar a que ese modelo llegue al mercado europeo con todas las garantías.
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Soy una periodista madrileña con más de 25 años de experiencia. Cursé los estudios de periodismo en el Centro de Estudios Universitarios San Pablo CEU. A lo largo de mi trayectoria profesional he trabajado en medios como Motor 16, Km77, Car & Driver o Quad & Jet, y he colaborado con departamentos de prensa como el de BMW.