Convertir nuestras ciudades en espacios más habitables es una tendencia que los ayuntamientos europeos se han marcado como objetivo. El cambio de la tecnología de combustión a la tecnología eléctrica no es suficiente, ya que los vehículos se han adueñado de las calles. Entrevistamos a Juan Azcárate, uno de los protagonistas del Ayuntamiento de Madrid que está contribuyendo a que la ciudad sea cada vez más amigable.
Aunque la longitud de su cargo pueda intimidar (Subdirector General de Energía y Cambio Climático – Dirección General de Sostenibilidad y Control Ambiental – Área de Gobierno de Medio Ambiente y Movilidad – Ayuntamiento de Madrid), lo cierto es que Juan Azcárate no presume de cargo. Más bien presume de ciudad. De una ciudad que está cambiando hacia una movilidad más humana.
Movilidad Eléctrica (ME). ¿Qué debería hacer una gran ciudad como Madrid para reducir la contaminación ambiental?
Juan Azcárate (JA) Lo principal sería hacer un buen análisis de las fuentes de contaminación. Muchas veces nos movemos por percepciones y no con datos reales que cambian de una ciudad a otra. La elaboración de mapas de ruido, estaciones de monitorización de calidad del aire, inventario de emisiones de GEI y de contaminantes atmosféricos, son la base fundamental.
ME. El transporte parece uno de los grandes contaminantes pero también nos llega de la climatización de las viviendas en general. ¿Qué es más visible?
JA. Es cierto que el tráfico es más visible y además el Ayuntamiento puede actuar de una forma más directa. Si estamos hablando de ruido, el tráfico es el más contaminante aunque hay otras actividades que pueden contaminar. Si estamos hablando de óxidos de nitrógeno, sí nos encontramos de nuevo con el tráfico, pero si hacemos referencia a los gases de efecto invernadero (GEI) a nivel local, la edificación es el principal origen. Es difícil generalizar, pero en términos de peso local, el tráfico es el principal contaminante de la ciudad de Madrid.
ME. ¿Cómo podríamos reducir ese gran tráfico en Madrid?
JA. Existe una estrategia europea definida por la siglas ASI, en la que la “A” viene de “Avoid/Reduce” (evitar el tráfico) que sería una primera acción para reducir el tráfico privado y sustituirlo por otro más eficiente. Hay medios para evitarlo como por ejemplo el teletrabajo, o acciones para disuadir al usuario de cruzar toda la ciudad para encontrar productos o servicios que tiene en su barrio.
La “S” viene de “Shift/Maintain” que habla del modo de transporte en que nos movemos y tiende a cambiar el transporte privado a un transporte público o de modalidad compartida. O incluso de incentivar el uso de la bicicleta o del paseo. Por cierto, Madrid es una de las ciudades europeas donde más se camina.
Y la “I” de “Improve”, mejorar la tecnología para disminuir la contaminación. Aquí entrarían todas las nuevas tecnologías como la eléctrica.
ME. El cambio de la flota de vehículos de combustión por vehículos eléctricos mejorará la contaminación ambiental, aunque tal vez continúe perjudicando la contaminación del espacio. ¿Habría que limitar el espacio para los vehículos privados?
JA. Bien, yo creo que nadie quiere tener un transporte con una mala experiencia de viaje. En ese caso, aunque cambiemos la tecnología de combustión por eléctrica, solucionamos un problema, pero eso no quiere decir que no vayamos a generar los mismos atascos. Hay que utilizar cada modo de transporte de la manera más inteligente y es una necesidad mejorar el transporte público y el transporte compartido.
Hay que tener en cuenta que el ciudadano exige cada vez más espacio público para moverse, y que por otro lado, la logística de transporte de pequeñas mercancías ha aumentado debido al comercio online. Aun tenemos una gran capacidad de mejora de nuestra movilidad, pero deberíamos modificar nuestros hábitos para mejorar nuestra calidad de medio ambiente.
ME. Uno de los puntos conflictivos puede llegar a ser la infraestructura de recarga en la vía pública. ¿Cómo debe gestionarse la infraestructura de recarga en la gran ciudad?
JA. Entendemos que es necesario hacer pedagogía y darnos cuenta de las necesidades pero respetar al mismo tiempo la vía pública. Hoy por hoy el uso del vehículo eléctrico supone tener una carga vinculada, donde el coche esté 6 o 7 horas cargando para hacerlo de forma lenta (lo más adecuado para la batería). Sin embargo, la densidad de Madrid y la falta de aparcamiento subterráneo en todas las viviendas complica la gestión de la recarga.
Sin embargo, creemos que la vía pública no es un garaje y que la mejor forma de recargar un vehículo eléctrico es en un garaje. Por eso queremos electrificarlos.
ME. Pero aún hay limitaciones legales en los aparcamientos de residentes, por ejemplo
JA. Sí. Es algo en lo que estamos trabajando, porque hasta el momento no se contemplaba la electrificación de las plazas de aparcamiento como un servicio que debía proveer el ayuntamiento. Sin embargo, la Empresa Municipal de Transportes (EMT), de la que dependen un buen número de aparcamientos, ya está gestionando la instalación de infraestructura de recarga.
Es un esfuerzo que deberíamos hacer todos. Tanto la administración como las distribuidoras de electricidad para ampliar potencia en determinados puntos, y por supuesto las empresas concesionarias.
Sabemos que la falta de demanda actual y el sistema de pago por coste fijo de potencia hace difícil el retorno de la inversión, pero debe haber fórmulas de actuación público/privadas con las que se llegue a realizar la instalación. Estamos en vías de aportar soluciones.
ME. Los sistemas de transporte de uso compartido cada vez requieren más espacio y normativas. ¿Cómo lo gestionan?
JA. La exención del pago del servicio de estacionamiento regulado, ha facilitado la existencia de estos servicios de carsharing o uso compartido. A partir de ahí, creo que son las empresas las que tienen que generar las acciones necesarias para su gestión.
Otro caso es el de los vehículos de movilidad personal, que han invadido en algunas ciudades espacios públicos y han provocado algo de incertidumbre y vacío legal. Esperamos que con la nueva normativa que está a punto de aprobarse por parte de la DGT, se establezcan las bases para que los peatones no se sientan invadidos por todas esas formas de movilidad.
En la actual ordenanza de movilidad que se está revisando, se incluye una reserva de espacio exclusiva para vehículos compartidos de cero emisiones. Es una señal del ayuntamiento hacia estos sistemas sin olvidar que son iniciativas privadas.
ME. ¿Cómo favorece al ayuntamiento los nuevos servicios de movilidad compartida o por suscripción?
JA. Está claro que vamos hacia un modelo de movilidad como servicio que está sustituyendo a la movilidad en propiedad. El ciudadano está cada vez más abierto a este tipo de servicios gracias a diversas aplicaciones que eligen el modo de transporte más adecuado en función de la distancia y el lugar al que te dirijas, y siempre de una forma más sostenible tanto para tu bolsillo como para la ciudad.
Quizás lo más inteligente es tratar de evitar un viaje, pero si lo necesitas, las alternativas de movilidad compartida benefician a la ciudad.
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.