La organización europea Transport & Environment (T&E), ha asegurado en un comunicado que los vehículos eléctricos necesitan actualmente mucha menos cantidad de materia prima que los vehículos de combustión interna. Además, se prevé que siga aumentando esta brecha cuando los avances tecnológicos consigan reducir a la mitad la cantidad de litio necesaria para la fabricación de una batería para vehículo eléctrico en la próxima década.
El analista de Transporte y Movilidad eléctrica de T&E, Lucien Mathieu, explica:
“Cuando se trata de materias primas, simplemente no hay comparación. Durante su vida útil, un automóvil de combustible fósil promedio quema el equivalente a una pila de barriles de petróleo de 25 pisos de altura (17.000 litros). Si se tienen en cuenta el reciclaje de los materiales de la batería, solo se perderían alrededor de 30 kilos de metales”.
Las baterías utilizarán un 50% menos de litio en la próxima década
T&E también asegura que, durante la próxima década, la cantidad de litio necesaria para la fabricación de una batería caerá hasta la mitad. Por su parte, el cobalto bajará en más de un 75% y el níquel lo hará en cerca de un 20%.
Además, en 2035, una quinta parte del litio necesario y un 65% del cobalto podrían provenir del reciclaje, un hecho que no puede hacerse realidad con los combustibles que necesitan los vehículos de combustión.
Futuras gigafábricas de baterías
Entre otros aspectos, T&E también ve “probable” que Europa produzca suficientes baterías para abastecer su mercado de vehículos eléctricos a partir de 2021 ya que se planean hasta 22 gigafábricas de este componente para la próxima década.
Lucien Mathieu señala:
“Esto está muy lejos de la situación actual en la que la flota de automóviles de Europa depende casi por completo de las importaciones de petróleo crudo. El aumento de la eficiencia y el reciclaje de las baterías dejará a la UE significativamente menos dependiente de las importaciones de materias primas”.
En definitiva, la organización concluye con que los vehículos cero emisiones necesitan un 58% menos de energía que un coche de gasolina a lo largo de su vida útil. Además, emiten menos dióxido de carbono incluso en países como Polonia, uno de los sistemas eléctricos en Europa con menos capacidad renovable instalada. En el ejemplo de este país, los automóviles eléctricos reducen un 22% sus emisiones respecto a vehículos de combustión.
Los países mejor preparados para el suministro de baterías de litio
En la clasificación establecida por BNEF de suministro de baterías de litio se ofrece un panorama que considera la posición del país en la actualidad y su perspectiva de futuro a 2025. Además, tiene en cuenta cinco temas para establecer la clasificación: materias primas, fabricación de células y componentes, el medio ambiente, RII y la demanda final (de vehículos eléctricos y almacenamiento estacionario).
A la vez que crece la demanda de los vehículos eléctricos, se hace necesario el desarrollo de instalaciones manufactureras de baterías cercanas a la producción automotriz. Esto ha llevado a un auge en las plantas de células europeas. La creciente industria dentro de la región y las fuertes credenciales ambientales que tiene Europa han hecho que en 2020 hasta cinco de sus países ocupen posiciones entre las primeras diez.