La compañía que dirige Elon Musk asegura que está probando una nueva tecnología de reciclaje de baterías que permite recuperar hasta el 92% de los componentes de las baterías de sus coches eléctricos
Los coches eléctricos son cero contaminantes durante su uso, pero no a lo largo de su proceso de producción o desguace. Uno de los elementos más contaminantes y, a la vez, importantes de estos vehículos es la batería. Finalizada su vida útil, los componentes de las baterías de los coches eléctricos son dañinas para el medio ambiente, de ahí que los fabricantes lleven tiempo trabajando duro en sistemas de reciclaje que reduzcan el impacto medioambiental.
Las últimas noticias a este respecto nos llegan de Palo Alto. Tesla está trabajando en una novedosa tecnología de reciclaje que permitiría dar una segunda vida a un 92% de los materiales que componen sus baterías.
Según ha explicado, Tesla está ya probando este sistema en las fábricas de Berlín y Texas con muy buenos resultados.
La tecnología de reciclaje de baterías de Tesla
Según los datos que ha publicado Tesla, con su tecnología de reciclaje de baterías ha conseguido extraer 1300 toneladas de níquel, 400 toneladas de cobre y 80 toneladas de cobalto desde que empezó a funcionar en 2020.
“Como fabricante de nuestras baterías, estamos mejor posicionados para reciclar nuestros productos de manera eficiente para maximizar la recuperación de materiales clave de la batería”, explica en un comunicado. Además, afirma que “nuestro objetivo es desarrollar un proceso de reciclaje seguro con altas tasas de recuperación, bajos costes y bajo impacto ambiental”.
Tesla trabaja en su nueva tecnología de reciclaje por conciencia medioambiental y por intereses económicos. “Desde el punto de vista económico, esperamos reconocer un ahorro significativo a largo plazo, ya que los costes asociados a la recuperación y el reciclaje de materiales de las baterías a gran escala serán muy inferiores a la compra de materias primas adicionales para la fabricación de células”, afirman. Dicho de otro modo, dar una segunda vida a los componentes de sus baterías le permitirá reducir los costes de producción; la buena noticia es que esto podría permitir también reducir el precio de venta de sus coches eléctricos.
Periodista de cuándo se maquetaba con tipómetro (no, no hace tanto...). Toda una vida dedicada a escribir sobre cómo la movilidad cambia (para bien) la vida de las personas. Ahora, con enchufe