Schaeffler confía en las tecnologías híbridas que emplean un motor eficiente de combustión interna, propulsores puramente eléctricos y una visión sostenible de la cadena de energía para el desarrollo de soluciones a medida que faciliten la electrificación de los propulsores.
El objetivo es una movilidad sin emisiones CO2. En el camino hacia esta meta, el sector de automoción puede elegir entre un amplio espectro de conceptos de propulsión. Peter Gutzmer, jefe de tecnología de Schaeffler, explicó en el 16º simposio CTI celebrado en Berlín que “una transformación tan radical no se logra de la noche a la mañana (…) Se trata de reducir emisiones a nivel global desde ahora mismo. Para tal fin, debemos desarrollar motores de combustión más limpios. Tanto este cambio como la seguridad integral en el suministro energético solo pueden lograrse combinando inteligentemente diferentes fuentes de energía y arquitecturas de propulsión”.
La movilidad sostenible solo tiene sentido si la energía primaria del vehículo cero emisiones está basada en energías renovables. Se debe tener en cuenta la cadena de energía al completo incluyendo la generación, su conversión, basada en una amplia oferta de esquemas de propulsión y el almacenamiento. Por ejemplo, si nos basamos en el actual mix de generación energético de la Unión Europea, un vehículo eléctrico continúa emitiendo el 65% del CO2 que emite un vehículo equivalente equipado con motor de gasolina. Por contraste, si ese vehículo eléctrico se carga exclusivamente empleando electricidad proveniente de fuentes renovables, la huella de emisiones desciende hasta un 3% respecto a un automóvil convencional.
La propuesta de Schaeffler para electrificar el tren propulsor
Con el eje eléctrico, Schaeffler ha desarrollado una solución modular para vehículos híbridos o eléctricos. La gama de producto parte de un eje eléctrico de una sola velocidad con diseño coaxial o paralelo. “Gracias al diseño planetario del diferencial, es posible desarrollar una transmisión extremadamente compacta con suficiente espacio para el motor eléctrico, que puede ser del tipo sincronizado o asíncrono”.
En el caso de los híbridos enchufables, con funcionamiento en eléctrico hasta los 120 km/H, se puede incorporar una segunda marcha. El eje eléctrico de dos velocidades desarrollado por Schaeffler permite mejorar el comportamiento dinámico gracias a la vectorización de par. Esta función se logra integrando un motor y transmisión diseñados para funcionar a 7 kW.
Además del diseño mecánico de los sistemas de propulsión eléctrica, los vehículos eléctricos requieren sistemas de gestión electrónica de potencia para los que Schaeffler ofrece un diseño avanzado, que permiten una eficiente conversión, control e integración de la energía eléctrica en todo el sistema
Schaeffler estableció el curso para la era de la electrificación mediante con el comienzo de sus actividades de investigación y desarrollo a finales de la década de 1990. En la actualidad, la compañía posee un amplio catálogo de productos de movilidad eléctrica. Los productos de Schaeffler abarcan desde módulos híbridos y ejes eléctricos hasta motores situados en el cubo de rueda que pueden ser integrados en vehículos híbridos o 100% eléctricos. Además, sistemas como el embrague E-clutch facilitan, por ejemplo, las funciones como el start-stop o el sailing combinados con transmisiones manuales en combinación con sistemas híbridos accionados por correa. Así, es posible reducir las emisiones de CO2 hasta en un 10% en condiciones reales de conducción
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.