Un estudio del ICCT revela que los coches eléctricos son mucho más limpios (en cuanto a emisiones de gases de efecto invernadero) que los de combustión, teniendo en cuenta toda su vida útil, incluida la fabricación de la batería de litio.
El informe de ICCT (International Council on Clean Transportation) utiliza los datos de emisiones de gases de efecto invernadero durante la fabricación de las baterías de los coches eléctricos. El resultado se incluye en el contexto de su ciclo de vida total y se compara con las emisiones de los vehículos de combustión interna convencionales que circulan en Europa.
El resultado es claro. Los vehículos eléctricos son mucho más limpios durante toda su vida útil, incluida la fabricación de la batería que los de motor de combustión. Algunas conclusiones más que se obtienen del estudio son:
- Un coche eléctrico actual, con características mecánicas medias, produce la mitad de las emisiones de gases de efecto invernadero que un turismo medio de combustión europeo. Además se puede concluir que un coche eléctrico que utilice el mis energético medio europeo es casi un 30% más limpio que el coche de combustión más eficiente existente hoy en día en el mercado.
- Los híbridos enchufables, si son propulsados en la mayoría de los viajes con energía eléctrica, en sus desplazamientos urbanos diarios, que es la forma ideal de utilizarlos, mantienen unas emisiones, en su ciclo de vida completo, similares a los vehículos eléctricos de batería.
- En los países con un mix eléctrico basado las energías renovables, como son Noruega o Francia, los vehículos eléctricos producen menos de un tercio de las emisiones que un vehículo con motor de combustión promedio, en todo su ciclo de vida. Este hecho debería reforzar la estrategia de los gobiernos para promover el uso de vehículos eléctricos como parte de su estrategia de descarbonización.
- Las emisiones más altas de un vehículo eléctrico se producen durante la etapa de fabricación, ya que aproximadamente la mitad de las emisiones proviene de fabricación de la batería. Estas se compensan durante los dos primeros años de vida, un año y medio si habitualmente se recarga con energías renovables.
- Las emisiones producidas por la fabricación de baterías son similares a las de la fabricación de un motor de un vehículo de combustión interna promedio y aproximadamente una cuarta parte de las emisiones de la vida completa del coche eléctrico. Sin embargo las estimaciones dicen que estas emisiones pueden variar hasta en un factor de 10, lo que indica la necesidad de realizar investigaciones adicionales en este campo.
- Las emisiones provocadas por la fabricación de las baterías disminuirán con el paso del tiempo a medida que se usen energías más limpias en todo el ciclo de producción. Una reducción de un 30% den el uso de energías no renovables disminuiría en un 17% las emisiones en la fabricación de la batería.
- También el uso de materiales reciclados y químicas de baterías alternativas podría reducir las emisiones en la fase de fabricación. Incluso cuando los vehículos eléctricos utilicen baterías más grandes para aumentar su autonomía, el resto de las mejoras aumentarán sus ventajas durante todo el ciclo de vida respecto a los vehículos con motor de combustión interna.
- Los gobiernos pueden continuar reduciendo las emisiones con políticas de reciclaje, segundo uso de la batería y descarbonización de la red, a la vez que promueven un mayor consumo de vehículos eléctricos. Disminuir la penetración de los vehículos eléctricos esperando que las emisiones sean casi nulas es incompatible con los objetivos globales para descarbonizar el sector del transporte para el año 2050
Los autores del estudio advierten de que la disponibilidad de datos en los procesos de fabricación de vehículos para la realización de estudios es imperfecta. A pesar de ello los beneficios de los vehículos eléctricos en comparación con los vehículos de combustión interna hoy en día son claros y van a ir en aumento en el futuro. El cálculo de las emisiones del ciclo de vida de todos los modelos de vehículos es caro y poco riguroso. En este sentido se debería legislar la obligación de informar sobre las emisiones de la fabricación de todos los componentes convencionales de un vehículo, además de la batería, para no penalizar injustamente a los vehículos eléctricos.
Texto del estudio completo (en inglés)
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.