Romain Dumas, tres veces ganador de la Pikes Peak, llegó, vio y venció. Tras pilotar para Porsche en las 24 Horas de Le Mans, el fin de semana pasado, partió hacia Colorado para participar las sesiones de prácticas y clasificación de la 96ª Pikes Peak International Hill Climb, a bordo del Volkswagen I.D. R Pikes Peak, el primer coche de carreras totalmente eléctrico de la marca alemana. El resultado no pudo ser mejor, primero, por lo que el domingo saldrá desde la pole, a las 16:00, con las motos en cabeza, como indica la tradición.
Dunas, a los mandos del Volkswagen I.D. R Pikes Peak, saldrá primero de la parrilla de salida de la 96ª Pikes Peak International Hill Climb, tras haber sido el más rápido en la clasificación, logrando un impresionante tiempo de 3:16,083 minutos, 11”049 más rápido que el segundo clasificado, Simone Faggioli, al volante de su Norma M20 SF SKP con motor de combustión.
“Un muy buen día para nosotros”, afirmó el tres veces ganador de la Pikes Peak, tras la roda de clasificación, y tildó de increíble el I.D. R Pikes Peak, del que dijo “nunca había sentido una aceleración y una potencia como esa en un coche de carreras. Siento que el coche y yo nos vamos fundiendo en una sola unidad con cada kilómetro que pasa”. Igual de satisfecho se mostraba el director de Volkswagen Motorsport, Sven Smeets, que felicitó al equipo y aseguró que “ayer completamos una prueba importante, cuyas lecciones nos han ayudado a optimizar todavía más la configuración del I.D. R Pikes Peak. El resultado es que el coche estaba perfectamente preparado; el tiempo registrado habla por sí mismo. Sin embargo, esto sólo era una fase clasificatoria. Somos optimistas de cara a la carrera, pero no debemos olvidar que tenemos una sola oportunidad”.
Gris, dorsal 94 y 680 CV
Dos semanas antes de iniciarse la carrera de montaña más famosa del mundo, el I.D. R Pikes Peak apareció en su última prueba oficial vistiendo sus colores definitivos y su dorsal. Gris, color distintivo de la familia I.D. y número 94, que simboliza las letras “I” y “D”, la novena y la cuarta letra del alfabeto, serán sus elementos exteriores identificativos. Como propulsores, el I.D. R Pikes Peak cuenta con dos motores eléctricos y un rendimiento del sistema de 500 kW (680 CV), mostrando la cara deportiva de la futura familia de coches eléctricos de serie, que Volkswagen lanzará a partir de 2020.
Durante las pruebas oficiales, los ingenieros se centrarán en los ajustes finales y Dumas aprovechará cualquier oportunidad para acostumbrarse al coche. El piloto, de 40 años, conoce el circuito como la palma de su mano -ha ganado tres veces – y se ha fijado batir el récord en la categoría de coches eléctricos, establecido en 8’57”118 minutos en 2016.
El I.D. R Pikes Peak
El deportivo de Romain Dumas incorpora el sistema de propulsión más sofisticado desarrollado nunca por Volkswagen Motorsport. Como explica François-Xavier Demaison, director técnico de Volkswagen Motorsport, “estamos rompiendo fronteras con el I.D. R Pikes Peak: es la primera vez que Volkswagen competirá con un coche totalmente eléctrico. Junto con el elaborado concepto aerodinámico y los requisitos especiales del chasis deportivo, el desarrollo del sistema de propulsión eléctrica fue el mayor reto”. Cuenta con dos baterías de iones litio integradas e interconectadas, localizadas a derecha e izquierda de la cabina del piloto. Estas alimentan por separado a dos motores de alto rendimiento para los ejes delantero y trasero. Juntas, proporcionan una potencia de 500 kW (680 CV). El verdadero nivel de potencia está controlado electrónicamente, en función del punto del recorrido. Esto significa que el comportamiento neutral ideal se consigue, por ejemplo, cuando se acelera al salir de un giro cerrado, ya que las ruedas delanteras también tienen que transmitir fuerza directriz al asfalto además de entregar potencia. Cuando Romain Dumas suelte el acelerador o el pedal de freno, los movimientos no se transmitirán por cables, sino de modo digital con e-gas y “brake-by-wire”, un sistema de frenado con transmisión de señales electrónicas.
Por si solo, el I.D. R Pikes Peak produce hasta el 20% de la electricidad requerida para la carrera de 19,99 kilómetros, ya que los motores funcionan como generadores durante la frenada. Este proceso de regeneración les permite generar potencia que fluye de nuevo hacia la batería y también contribuye en parte al rendimiento de la propia frenada. Un sistema de frenado convencional proporciona la deceleración adicional requerida.
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.