EVBox surgió en 2010 como una startup holandesa especializada en puntos de carga para vehículos eléctricos. Desde entonces, se ha desarrollado exponencialmente. Así son sus cifras: más de 200.000 puntos de carga instalados, de los que más de 5.000 son de carga rápida; presencia en más de 70 países; y más de 20.000 clientes comerciales.
Hemos hablado con Noemí Valero, ingeniera de Soluciones de EVBox Ibérica sobre el despliegue de la infraestructura en España, a nivel general. Asimismo, hemos querido saber qué papel juega EVBox en este desarrollo, tanto por lo que respecta a la carga pública, como privada. Aquí están sus respuestas.
-Antes de nada, ¿desde cuándo está EVBox en España?
-EVBox llegó a España, concretamente a Madrid, donde está nuestra sede, en 2017 de la mano de Borja Moreno, actual director regional para todo Iberia. Entonces, la empresa sólo contaba con unos 50 empleados. A día de hoy, la empresa tiene más de 1.300 y se ha extendido por todo el país, gracias a nuestros partners. Con ellos damos servicio en cualquier lugar.
-El desarrollo de EVBox ha sido espectacular a nivel global. ¿A qué atribuye usted este éxito?
-Por un lado, nuestro compromiso con estándares abiertos, como OCPP (1) u OCPI (2), garantiza que lleguemos a todas partes. Y tanto en cuestión de hardware como de software. Eso proporciona la máxima flexibilidad a nuestros clientes. Pero también añadiría diseño y tecnología propios, que desarrollamos en nuestros 2 centros de I+D+i, situados en Ámsterdam y Burdeos.
-¿Cómo ve usted el desarrollo de la infraestructura en España?, ¿Considera que es un problema para la expansión del vehículo eléctrico?
-Si nos centramos en infraestructura pública, que es la que realmente podemos contabilizar, Europa cerró 2020 con más de 210.000 puntos. Y, de ellos, más de 8.000 están repartidos por España. Esto supone un crecimiento respecto a 2019 de +30% para Europa y +45% para España, lo cual son muy buenas noticias.
Sin embargo, si nos comparamos con otros países, como Alemania o Francia, que tienen un tamaño similar a España, estamos aún lejos de alcanzar sus más de 40 000 puntos de recarga.
No obstante, la situación depende del cristal con el que se mire. Según los últimos informes de AEDIVE, si comparamos la ratio de turismos eléctricos por punto de recarga público, la UE y España tienen valores similares. Además, ahí sí estamos mejor posicionados que países como Alemania. Lo que está claro es que hacen falta más estaciones de carga. Y, obviamente, las ayudas del Plan Moves III y la nueva Ley de Cambio Climático y Transición Energética ayudarán mucho.
-¿Puede ser que el parque de vehículos eléctricos en España no se desarrolle con más fuerza por el lento crecimiento de la infraestructura de carga pública?
-Desde luego que la escasez de infraestructura pública supone un obstáculo para el desarrollo de la movilidad eléctrica. Por un lado, si no hay suficientes vehículos eléctricos los operadores difícilmente instalarán infraestructura a gran escala. Y a su vez, la venta de vehículos eléctricos caerá si no hay suficientes estaciones de carga pública. La situación actual, tanto de España como de Europa, es que la adopción de vehículos eléctricos va a un ritmo muy superior al de la infraestructura de recarga. Y eso ha de cambiar rápidamente si queremos evitar frenar su despliegue.
-Sólo el 22% de la infraestructura de carga pública tiene una potencia superior a 22kW. ¿No puede ser otro hándicap en el futuro?
–Es importante que el despliegue de infraestructura se haga de una manera homogénea para permitir los desplazamientos por todo el territorio español. Eso incluye la carga rápida, por ejemplo, en zonas de tránsito que faciliten cubrir grandes distancias.
En este sentido, desde EVBox creemos que es esencial garantizar la disponibilidad de cargadores, ya que si no funcionan, podrían dejarte a mitad de camino. En esa línea, nuestros equipos cuentan con una oferta de servicios y mantenimiento proactivo y preventivo. Además, próximamente añadiremos a nuestro portfolio un equipo de carga rápida con tecnología modular que reducirá significativamente los costes de mantenimiento y actualización. Mejorarán el retorno de la inversión de este tipo de instalaciones y favorecerán aún más este despliegue.
-Se espera que en los próximos años se consiga la paridad de precios de un coche eléctrico y uno convencional. ¿Qué ventajas ofrecería cargar en casa frente a una estación pública?
-Además de la comodidad, recientemente el Ministerio para La Transición Ecológica ha creado una comparativa de costes de los combustibles utilizados en España. En dicha comparativa se observa que el combustible más económico es la electricidad en el ámbito doméstico, donde se estiman 2,21 €/100 km.
La carga residencial, como la de nuestra solución EVBox Elvi, permite que el coche se cargue de forma óptima. Y lo hace incluso en parkings comunitarios, donde es capaz de distribuir la capacidad de energía disponible para que la carga sea la adecuada.
No obstante, no todas las viviendas cuentan con aparcamiento, por lo que la carga pública es esencial tanto en calles, comercios, o gasolineras por ejemplo.
-¿Qué otras novedades podemos esperar de EVBox?
Como empresa, seguir creciendo para alcanzar nuestro objetivo de 1 millón de conectores para 2023. Y no sólo en Europa, sino también en EEUU, donde próximamente saldremos en la bolsa de Nueva York a través de a través de TPG Pace Beneficial Finance.
Y en cuanto a producto, seguir creando soluciones integrales de recarga que integren tecnologías como V2X y servicios habilitados en la nube. Permitirán dar un paso más hacia una nueva movilidad eléctrica compartida, autónoma y conectada.
Gracias, Noemí. Y buena suerte para que EVBox siga desarrollándose como uno de los actores clave del desarrollo de la movilidad eléctrica. Hasta pronto.