¿Buscas una moto eléctrica, pero no te resignas al típico scooter? Pues aquí te hacemos una propuesta de las mejores 7 motos eléctricas deportivas para 2023, desde un presupuesto humilde hasta si quieres tirar la casa por la ventana. Dependiendo del modelo, necesitarás tener cerca de ellas un enchufe, o podrás retirar las baterías para cargarlas donde mejor te venga.
Si los coches eléctricos son muy eficientes, en las motos eléctricas el gasto de energía es aún más bajo. Incluso cargando con precios de electricidad sin bonificar, recorrer 100 km cuesta menos de 1 euro, de hecho, suele costar céntimos. El mercado nos ofrece varias posibilidades en categoría A1/B, A2 y A, con presupuestos muy diferentes.
No hay dos motos eléctricas iguales. Cambian bastante a nivel estético, por disposición del motor, si las baterías son fijas o extraíbles, si cargan solo en CA o también en CC, por sus prestaciones, etc. En varios casos ya están muy cerca de las de gasolina en cuanto a precio de adquisición, aunque el mantenimiento es mucho más económico. De momento, son todas “automáticas”, de cambio manual no hay ninguna -pocas ventajas aporta-, salvo un prototipo de KYMCO.
Ebroh Bravo CR – 5.990 euros
Tenemos a nuestra disposición la Ebroh Bravo CR, alternativa directa en precio a una deportiva carenada de 125 cc. Con su motor de cubo trasero y 5 kW/6,8 CV puede alcanzar los 100 km/h. La parte ciclo no es demasiado ambiciosa, con neumáticos 110/70 y 140/70 de 17 pulgadas y sistema de frenada CBS con doble disco delantero y disco trasero.
La autonomía es de hasta 100 km, por lo que es más utilitaria que apta para salir de curvas. Con el cargador de 14 amperios necesita unas 5 horas para una carga completa.
Energica Ego+ – 31.551 euros
Cualquier otra moto eléctrica tendrá las mejores prestaciones del mundo, pero solo si la Energica Ego+ no está presente. Con esta moto, todo son palabras mayores. Con su última actualización, con 21,5 kWh de capacidad, su autonomía alcanza en ciclo urbano los 420 km. No tiene nada que envidiar a una “mil”, acelera a 100 km/h en menos de 3 segundos y corre más que de sobra, 240 km/h de punta.
Sin añadir ningún extra, son más de 30.000 euros de moto. Es el precio a pagar por la mejor moto eléctrica del mundo. La versión Ego+ (por encima está la Ego+ RS) rinde 110 kW/149 CV y un monstruoso par de 222 Nm. Puede recargar en CC, lo que significa que recupera autonomía a un ritmo de 400 km/h o 6,7 km/min. Hasta para eso es rápida.
Evoke Urban Classic – 11.960 euros
Este modelo no tiene carenado aerodinámico, pero no es la típica naked eléctrica con un chasis de cuna, tiene uno tubular. La Evoke Urban Classic pone al alcance del motorista una buena parte ciclo con todas las ventajas de un vehículo eléctrico. Además, no requiere el carné de moto, pero tiene prestaciones superiores a una deportiva de 125 cc a gasolina. Su velocidad punta supera los 130 km/h y el motor de cubo de rueda da picos de 20 kW/27 CV.
El paquete de baterías de casi 10 kWh permite recorrer 250 km en zona urbana o hasta 150 km a ritmo de autopista. El proceso de recarga en CA se puede acortar a 60 minutos con el cargador dual, en casa harán falta algunas horas. El fabricante asegura que en 2.000 ciclos (300.000 a 500.000 km) las baterías mantendrán el 80% de capacidad.
Ovaobike MCR-S – 15.890 euros
Otra opción en el segmento street fighter, y en un término medio en cuanto a precios. Sus prestaciones son también fuera de serie con el permiso A1/B, no requiere carnés superiores porque su potencia nominal es de 10,5 kW. Eso sí, alcanza los 126 km/h en modo sport, o 148 km/h en el turbo, y acelera a 100 km/h en 8 segundos. Su motor central entrega 22 kW de potencia máxima.
Con dos baterías, la Ovaobike MCR-S acumula 9,6 kWh, por lo que puede recorrer hasta 210 km a un ritmo de 50 km/h. La recarga habitual del 20% al 80% llevará 5 horas y media. Su cargador integrado tiene 1,2 kW de potencia.
Pursang E-Track – 9.400 euros
Tampoco es la típica deportiva, pero promete mucha diversión en formato flat track y neumáticos 120/80 y 150/70 de 18 pulgadas. Cuenta con un motor central Bosch de 11 kW de potencia nominal que lleva la fuerza mediante cadena a la rueda trasera. Su alcance máximo es de 140 km.
En cuanto a ficha técnica, está en un término medio. Alcanza los 110 km/h y necesita 6 horas para estar totalmente cargada. Una vez se hace el pedido, la Pursang E-Track tarda dos a tres semanas en llegar. Todos los componentes son de fabricación española salvo el motor Bosch.
Urbet Gadiro E-125 – 3.500 euros
Para los que quieran algo más apto para el día a día, pero con un estilo street fighter, la Urbet Gadiro E-125 es una opción a considerar. Su potencia máxima es más modesta, 5 kW/6,8 CV, y la punta es de 90 km/h -como una 125 cc monocilíndrica refrigerada por aire-. Sus puntos fuertes son el diseño moderno y minimalista, la batería extraíble, y la opción de segunda batería.
Su planteamiento es sobre todo urbano, con una autonomía de 80 a 100 km al mínimo coste posible. Disponible también en versión limitada (ciclomotor), a partir de los 15 años con permiso AM.
Zero SR/S – 26.860 euros
Por último, una de las opciones más equilibradas. El precio habitual de la Zero SR/S es de 26.860 euros, aunque ha estado un tiempo promocionada a 23.360 euros al estar fuera de ayudas. Este modelo es también de altas prestaciones, alcanza los 200 km/h y el motor central pone a disposición del puño derecho 110 CV y 190 Nm. También es rápida recargando, a 6 kW estará al 95% en menos de una hora.
Con el paquete de 17,3 kWh puede recorrer 150 km a un ritmo de 113 km/h, o hasta 301 km en zona urbana. A tener en cuenta por los amantes de la tecnología, ya que tiene conectividad, distintos modos de conducción, Control de Estabilidad de la Motocicleta (MSC), pantalla TFT de 5” a todo color, etc.