Nos hemos referido en diferentes ocasiones a Silence, el fabricante español de motos eléctricas. Lo cierto es que la compañía ha ido consiguiendo premios y desarrollando una innovadora tecnología que está teniendo el lógico y esperado reconocimiento.
En esa línea, hace unos días supimos que habían conseguido un nuevo premio, uno más. No nos extraña que su fundador y CEO, Carlos Sotelo, haya dicho que 2019 será el de la “era Silence“.
Hemos querido saber algo más sobre la compañía, su estrategia, el porqué de su éxito y el por qué las motos. Por ello, hemos hablado con Carlos Sotelo y aquí están sus respuestas.
-¿Por qué motos?
-Toda mi vida ha girado en torno a las dos ruedas. Desde bien pequeño las motos me apasionaban y es una pasión que, con el paso del tiempo, he convertido en profesión. Empecé en el mundo de la moto corriendo en enduro y siendo campeón de España en tres ocasiones. Después, me atreví con el Dakar. En ocho ocasiones he corrido en el Paris Dakar en África y el año 96 logré una tercera posición. Más allá de la faceta de piloto también –a nivel negocios- he estado rodeado de motos.
-¿Cómo surgió la idea de Silence?
-He tenido negocios propios de distribución de motos y hace más de diez años que estoy involucrado en proyectos de vehículos de dos ruedas eléctricos. Tanto que en 2012 se me presentó la oportunidad de crear nuestra propia moto. Fue junto a un equipo formado de 4 personas que sería un scooter eléctrico de prestaciones de 125cc. La S01. Ahora, siete años después contamos con un equipo de 80 profesionales y somos líderes de mercado en el motos eléctricas L3e, matriculando –solo a nivel nacional- más de 2.000 motocicletas, convirtiéndonos en la marca (de cualquier tipo de vehículo eléctrico) que más matriculaciones ha sumado en el ejercicio 2018.
-¿A qué cree que se debe el éxito de las motos eléctricas de Silence?
-Muy fácil –a la par que complejo-: perseverancia y fe en lo que uno realmente cree. La concienciación social y de las administraciones que cada vez apuestan más por una movilidad sostenible y alejada de la polución, diría que es el principal punto para que la sociedad haga ese ‘cambio de chip’ y pase del combustible a la energía eléctrica.
“La causa del éxito de Silence para Carlos Sotelo: <<Muy fácil -a la par que complejo-: perseverancia y fe en lo que realmente uno cree>>”.
Si nos centramos en el caso concreto de Silence, el éxito recae en hacer una moto de calidad, de altas prestaciones. Un buen producto para que nuestros clientes –que hasta ahora han sido 100% flotas de parques públicos o dirigidas a servicios varios- puedan, a su vez, ofrecer un servicio de alta calidad y con la seguridad de estar en buenas manos.
-¿El negocio de la compañía es el desarrollo y fabricación de motos eléctricas exclusivamente?
-Sí, teniendo en cuenta que desde Silence fabricamos tanto la moto como la batería.
-¿Silence también desarrolla sus propias baterías?
-Efectivamente. Más allá de la scooter, Silence juega con la ventaja de contar con un centro de I+D dedicado en exclusiva a que la moto tenga las mejores prestaciones. Eso pasa, por supuesto, por tener el control de la batería que es, en el caso de un vehículo eléctrico, el corazón del vehículo. Lo que sí está claro es que Silence no deja de apostar –sea como sean las baterías- por el segmento de los vehículos eléctricos matriculados, tipo scooter 125cc de gasolina, con homologación L3e.
El trabajo diario consiste en la mejora constante de la batería de altas prestaciones. El futuro de la movilidad eléctrica pasa, sí o sí, por lograr la mayor densidad energética de la batería.
-¿Es la movilidad eléctrica nuestro gran reto?
-A nivel movilidad, efectivamente creo que el gran reto que tiene la sociedad es hacer un cambio hacia la movilidad de cero emisiones. Buscar esa opción que no contamine sin dejar de lado las prestaciones que necesita el cliente. Es en ese lugar donde Silence tiene sentido. Hasta ahora fabricamos motos diseñadas para el sector B2B ya sea para parques públicos, empresas de servicios o motosharing. Ahora, además, sacamos al mercado la S01, una moto eléctrica con prestaciones de 125cc y exclusivamente pensada para el cliente particular. Su punto fuerte es la batería que la acompaña. Más allá de la elevada potencia (5Kwh), es una batería extraíble. Es decir, el cliente puede llevársela a casa, gracias a su diseño tipo maleta trolley, para recargarla.
Además, cuenta con un ‘inverter’ que permite al usuario cargar otros dispositivos en esa misma batería y, por lo tanto, emplearla para otros usos más allá de la moto.
En definitiva se trata de hacer fácil la movilidad.
“Tras terminar el año con un 60% de la cuota de mercado –en nuestro segmento- a nivel nacional y también ser líderes en matriculaciones –de cualquier vehículo eléctrico- el objetivo principal a medio plazo es establecernos en Europa como líder”
-¿Cuáles son los objetivos de Silence, de cara a un futuro a medio plazo?
-Tras terminar el año con un 60% de la cuota de mercado –en nuestro segmento- a nivel nacional y también ser líderes en matriculaciones –de cualquier vehículo eléctrico-, el objetivo principal a medio plazo es establecernos en Europa como líder. En ese sentido estamos dedicando esfuerzos para ampliar nuestra red comercial y de distribución en los distintos países.
Más allá de la ampliación de fronteras, para este 2019 que acabamos de empezar, el objetivo tiene nombre propio: S01.
Si hasta ahora nuestro principal cliente era la empresa ahora nos focalizaremos también en el particular, ofreciéndole una scooter de calidad y elevadas prestaciones para sus desplazamientos urbanos.
Mil gracias por las respuestas, Carlos. Esperamos y deseamos un camino tan destacado para Silence y todo vuestro equipo como el que está teniendo. Hasta pronto.