BMW y Jaguar Land Rover han anunciado un acuerdo de colaboración. Su objetivo es ayudar a que la evolución de la tecnología de electrificación esté disponible para el comienzo de la próxima década.
BMW lleva ya tres años desarrollando su estrategia de movilidad eléctrica. Hemos dejado clara la posición relevante del grupo en cuanto a gama electrificada en el mercado. Sin embargo, BMW reconoce que la cooperación entre fabricantes de automóviles para compartir conocimientos y recursos es importante. Es innegable que la industria automotriz se enfrenta a importantes desafíos tecnológicos de conducción autónoma, conectividad, electrificación y servicios (ACES).
El Grupo BMW y Jaguar Land Rover han confirmado que están uniendo fuerzas para desarrollar la siguiente generación de motores eléctricos, transmisión y electrónica de potencia. Así, la cooperación favorecerá el avance de las tecnologías de electrificación necesarias para la transición hacia el futuro.
BMW Group y Jaguar Land Rover comparten la visión estratégica de tecnologías de propulsión eléctrica. Asimismo, la idea de que deben ser respetuosas con el medio ambiente y estar orientadas hacia el futuro.
La marca alemana aporta su experiencia en el desarrollo y la producción de varias unidades de propulsión eléctrica. Recordemos que BMW lanzó el i3 en 2013. Mientras, Jaguar Land Rover ha demostrado su capacidad con esta tecnología con el Jaguar I-Pace y sus modelos híbridos enchufables.
Tecnología de electrificación
La tecnología de electrificación más sofisticada hasta la fecha de BMW cuenta con un motor eléctrico, transmisión y electrónica de potencia. Este motor eléctrico no requiere tierras raras, lo que permite a BMW reducir la dependencia de su mayor o menor disponibilidad. Por ello, el fabricante continúa ampliando su gama de modelos electrificados.
A partir del próximo año, BMW Group presentará la quinta generación (“Gen 5”) de su tecnología eDrive. Será con el BMW iX3 Sports Activity Vehicle.
Las siguiente evolución que lance junto a Jaguar Land Rover estará basada en la unidad de propulsión eléctrica Gen 5.
Klaus Fröhlich, miembro de la Junta de Administración de BMW AG, ha explicado:
“La industria automotriz está experimentando una fuerte transformación. Vemos la colaboración como una clave para el éxito, también en el campo de la electrificación. Con Jaguar Land Rover, encontramos un socio cuyos requisitos para la generación futura de unidades de propulsión eléctrica coinciden significativamente con los nuestros. Juntos, tenemos la oportunidad de atender más eficazmente las necesidades de los clientes al acortar el tiempo de desarrollo y llevar los vehículos y las tecnologías más avanzadas al mercado más rápidamente”.
Por su parte, Nick Rogers, director de Ingeniería de Jaguar Land Rover, ha dicho:
“La transición a ACES representa el mayor cambio tecnológico en la industria automotriz en una generación. El ritmo del cambio y el interés del consumidor en los vehículos electrificados están cobrando un verdadero impulso. Y es esencial que trabajemos toda la industria para avanzar en las tecnologías necesarias para ofrecer este emocionante futuro”.
Y, además:
“Hemos demostrado que podemos construir los mejores coches eléctricos, pero ahora necesitamos escalar la tecnología para respaldar la próxima generación de productos Jaguar y Land Rover”.
La cooperación BMW y Jaguar Land Rover
La cooperación permite a BMW Group y Jaguar Land Rover aprovechar la eficiencia de costes. Sobre todo los derivados del desarrollo compartido de evoluciones futuras y los costes de planificación de la producción. Asimismo, las economías a escala de compras conjuntas.
El equipo de expertos de BMW y Jaguar estará ubicado en Munich. Se encargará de desarrollar aún más las unidades de potencia Gen 5. Cada socio realizará la producción de las transmisiones eléctricas en sus propias instalaciones de fabricación. Ambas compañías buscarán adherirse a sus propias propuestas de marca en cualquier proyecto.