La Asociación de Empresas de Energía Eléctrica (Aelec) ha considerado que la ausencia de una suficiente infraestructura de recarga para vehículos eléctricos supone “el principal freno” a la compra de este tipo de vehículos, ya que sin ella su uso se ve restringido a las ciudades y a trayectos cortos.
En un comunicado con motivo de la Semana Europea de la Movilidad, la patronal que agrupa a las grandes eléctricas (Endesa, Iberdrola, Naturgy, EDP y Viesgo) señala que el desarrollo y despliegue de esta infraestructura de recarga “es esencial” para impulsar este tipo de movilidad y para contribuir a la reducción de las emisiones, avanzando y facilitando así el proceso de transición energética.
La patronal, que recuerda que los objetivos de la Comisión Europea incluyen una reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero del 40% en 2030, respecto a los niveles de 1990, subraya que el vehículo eléctrico también tendría el efecto positivo de una mejora de la calidad del aire en las ciudades.
Así, la asociación pide que se pongan en marcha políticas y colaboraciones público-privadas que garanticen el despliegue “necesario” de la infraestructura para la carga no sólo en edificios, sino también en la vía pública, “dado que la mayor parte del parque automovilístico carece de plaza de garaje”.
Para ello, Aelec se ofrece a colaborar con la Administración en la definición de una red suficiente de recarga en vía pública, así como en analizar propuestas que hagan viable su desarrollo.
La patronal, que recuerda que los objetivos de la Comisión Europea incluyen una reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero del 40% en 2030, respecto a los niveles de 1990, subraya que el vehículo eléctrico también tendría el efecto positivo de una mejora de la calidad del aire en las ciudades.
De esta manera, teniendo en cuenta que el sector del transporte es responsable de una cuarta parte del total de emisiones de la Unión Europea, Aelec destaca que actualmente la electricidad supone tan solo un 1% del uso total de energía en el transporte, por lo que existe “un amplio margen de mejora” en la reducción de emisiones en el transporte por carretera.