Tesla ha emitido un comunicado en el que explica la polémica del contrato de piezas cancelado del Model 3 por incumplimiento de las especificaciones. Un asunto polémico que coincide con la llegada de Donald Trump y sus políticas de protección de su mercado interior.
La semana pasada Tesla canceló un importante pedido de componentes del Model 3, realizado el pasado septiembre, al suministrador alemán SHW Automotive, una empresa dedicada a la fabricación de componentes para motores, bombas y discos de frenos. Al instante saltaron las especulaciones que relacionaban este asunto con la política anunciada por el nuevo presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de proteger el mercado interno.
Hasta ese momento Elon Musk se había reunido un par de veces con Trump, ya que forma parte de su Foro de Política y Estrategia, y algunas agencias de noticias alemanas se adelantaron a anunciar que la cancelación del contrato se debía a este motivo, sugiriendo incluso que podrían emprenderse acciones legales.
Sin embargo Tesla ha querido aclarar esta situación lo antes posible remitiendo un comunicado en el que anuncia el motivo de la cancelación de este pedido:
La razón principal por la que confirmamos la cancelamos la orden de suministro de bombas de dirección de SHW es por contrarrestar las afirmaciones falsas de que estábamos actuando en respuesta a la presión política. La cancelación de la orden es debida a que no se han cumplido las especificaciones y normas técnicas definidas en el contrato
Tesla avisa a todos sus suministradores
Para SHW la cancelación de este pedido supone una pérdida de alrededor de 100 millones de euros, lo que ha provocado una bajada del 10% en el valor de sus acciones, la más baja en varios meses. Por el momento la empresa alemana no ha aceptado los motivos esgrimidos por Tesla y se reserva el derecho de emprender acciones legales para pedir daños y perjuicios.
¿Y que supone para Tesla? Se podría suponer que la pérdida de este contrato puede traducirse en un retraso en la fabricación del Model 3. Lo veremos, aunque algunos analistas creen que la rigurosidad que Tesla aplica a sus plazos puede traducirse en un antecedente para que sus suministradores oferten sus productos sabiendo que han de cumplir los plazos, lo que a Tesla le facilitará poder exigir sus condiciones.
La línea de tiempo de Tesla que le lleva a alcanzar las fechas previstas para el lanzamiento del Model 3 es muy rigurosa y estricta y admite pocos cambios: “La política de Tesla es prescindir de cualquier proveedor que sea incapaz de cumplir con sus hitos contractuales o viole el acuerdo de divulgación suscrito”.
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.