El tercer conjunto de medidas diseñado para implementar los objetivos de ‘Europe on the Move’ para modernizar el transporte, la Comisión Europea propone para los camiones pesados una reducción del 15% en las emisiones de CO2 en 2025 y el 30% en 2030, a partir de los niveles de 2019. Los objetivos para 2030 se revisarán en 2022.
El alcance de estas normas se extiende a camiones, autobuses, autocares y remolques pequeños. Como segundo paso en la implementación de las nuevas regulaciones para reducir las emisiones de CO2, la Comisión Europea planifica una revisión temprana de las medidas para 2030 en 2022.
Para permitir mayores reducciones de CO2, la Comisión facilitará el diseño de camiones más aerodinámicos y mejorará el etiquetado de energía para los neumáticos:
- La Comisión propuso adelantar la fecha (por tres años, hasta 2019), para que los fabricantes comercialicen nuevos vehículos pesados con cabinas más redondeadas y aerodinámicas. Además de reducir las emisiones de CO2, lo que mejorará la seguridad vial, la visibilidad y la comodidad de los conductores.
- Las etiquetas de energía revisadas se aplicarán a todos los neumáticos: automóviles, furgonetas o vehículos pesados fortaleciendo los requisitos de eficiencia del combustible, ruido y seguridad. Una vez que entren en vigencia, los consumidores tendrán más información para elegir neumáticos eficientes y seguros.
Las propuestas deben ser aprobadas por los gobiernos de la Unión Europea y el Parlamento Europeo antes de convertirse en ley.
La reacción de la ACEA, Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles
El organismo que representa a los siete principales fabricantes de vehículos pesados de la UE, acoge con satisfacción el enfoque de dos pasos de la Comisión, en los que se establecen los objetivos para 2025 y 2030. También cree conveniente validar el de 2030 en una revisión posterior, ya que esto permitiría tener en cuenta las últimas tecnologías de eficiencia de combustible disponibles en ese momento.
Sin embargo, ACEA afirma que los niveles de reducción propuestos por la Comisión para 2025 y 2030, 15% y 30% respectivamente, son “demasiado agresivos y no han sido seleccionados teniendo en cuenta la naturaleza específica del mercado de camiones“. Dado que los vehículos que se venderán en 2025 ya están en fase de desarrollo, el primer nivel de reducción es demasiado estricto.
Además, añadir a esta reducción del 15% para 2025 otro 15% para 2030 va contra un avance realista de la tecnologías de ahorro de combustible más avanzadas que necesitarán más tiempo para desarrollarse.
Dependiendo de su finalidad, la mayoría de los camiones se construyen de forma personalizada cumpliendo con los requisitos específicos del cliente. Puede variar desde el número de ejes hasta el tamaño del motor, el tanque de combustible, la cabina o la altura del chasis. Teniendo en cuenta el vehículo completo, el remolque y la cabeza tractora, el mercado de camiones se vuelve todavía más complejo.
Erik Jonnaert, Secretario General de la ACEA: “Parece que la Comisión simplemente ha tomado los niveles reducción de CO2 que ya propuso para automóviles y furgonetas, y los ha aplicado directamente a vehículos pesados, sin reconocer completamente las diferencias fundamentales entre estos segmentos de vehículos”.
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.
una palabra lo resume todo. ” excusas” . Todavia no se han enterado los fabricantes de camiones que el ICE Esta muerto?