La compañía está en negociaciones para iniciar los trabajos de construcción de su fábrica de baterías en Europa. Su objetivo es evitar un posible desabastecimiento cuando comience la comercialización de todos sus modelos enchufables
De momento nada apunta a que la marca alemana esté teniendo problemas para dotar a sus coches eléctricos de baterías, pero en el grupo se preparan para la llegada de un buen número de enchufables por lo que las cosas podrían cambiar.
Para evitar que sus planes de electrificación se vean ralentizados, Volkswagen ha anunciado una inversión de 1.000 millones de euros para la construcción de una fábrica de células de baterías para vehículos eléctricos en Salzgitter (Alemania).
Según publica la agencia de noticias EuropaPress, el consejo de supervisión de Volkswagen ha aprobado la instalación de una fábrica de baterías en Europa como parte de la ofensiva eléctrica que está llevando a cabo la compañía (el primer modelo de la familia ID.3 todavía no ha sido presentado y acumula más de 10.000 pre-reservas).
“Dada la cada vez mayor complejidad de nuestra industria y los retos vinculados a ella, es esencial centrarse en nuestro eje de negocio principal”, ha dicho el máximo responsable del órgano de vigilancia del consorcio alemán.
“Estamos impulsando la electrificación y la digitalización de nuestra flota como ninguna otra compañía. Al mismo tiempo, estamos creando áreas de negocio innovadoras para satisfacer en los próximos años a los servicios de movilidad innovadores”, han sido las explicaciones de Herbet Diess, CEO de la compañía.
Periodista de cuándo se maquetaba con tipómetro (no, no hace tanto...). Toda una vida dedicada a escribir sobre cómo la movilidad cambia (para bien) la vida de las personas. Ahora, con enchufe