Ante el compromiso de la Generalitat de Cataluña de aprobar una norma que obligue a contratar los servicios de un vehículo VTC con un tiempo de antelación, plataformas como Uber y Cabify anuncian que dejarán de operar en Cataluña. Desde Movilidadelectrica.com nos preguntamos: ¿cómo afectará esta decisión a la movilidad?
Barcelona y Madrid viven desde hace días sumidas en el caos. Los taxistas están huelga indefinida (desde el viernes en la ciudad condal y desde el lunes en la capital) para protestar contra los vehículos de alquiler con conductor que consideran “competencia desleal”.
No es la primera vez que esto sucede. El conflicto viene de lejos; basta con remontarse al verano para rememorar la última huelga de taxistas que se extendió por toda España.
El detonante de esta nueva jornada de paros ha estallado en Cataluña. La Generalitat mostró su compromiso por regular el uso de las VTC y anunció la aprobación de una norma que obligase a reservar con antelación los servicios de empresas como Uber y Cabify.
Se habló primero de un plazo de no menos de seis y no más de 12 horas, pero luego el gobierno catalán rectificó y habló de minutos. La respuesta del sector del taxi a este cambio fue una huelga indefinida en la que se han producido numerosos disturbios.
Los taxistas de Madrid aprovechan FITUR
Los taxistas madrileños anunciaron que se sumaban a la huelga indefinida el lunes 21. La fecha no era casual: esta semana se celebra en Madrid FITUR, la Feria del Turismo y uno de los eventos más importantes a nivel nacional.
Este escenario da fuerza a unas protestas durante las cuales han cerrado los accesos al aeropuerto, han colapsado las principales arterias de la capital y como sucediera en Barcelona se han registrado varias agresiones.
Precontrato: entre 15 minutos y una hora
Tras la última reunión con varios representantes del taxi en Barcelona, a última hora de ayer la Generalitat anunció que aprobará con urgencia (se habla de la próxima semana) un Real Decreto en el que se establezca un tiempo mínimo de precontratación de los servicios de VTC de 15 minutos. En el Área Metropolitana de Barcelona (zona conocida como AMB) se podrá ampliar el plazo a una hora.
Con esta decisión los taxistas dicen que se pensarán si seguir adelante con los paros. Las VTC agrupadas en Unauto, por su parte, lanzaron un comunicado en el que “lamentan que la Generalitat haya cedido al chantaje de los taxistas”, anuncian que “estudiarán todas las medidas legales a su disposición” para tumbar esta medida y adelantan que la decisión supone el final de las VTC en Cataluña.
En Madrid no hay acuerdo
De vuelta al segundo escenario, seguimos sin acuerdo.
FITUR abre hoy sus puertas y los taxistas que bloquean los accesos lo hacen ánimo renovado ante las noticias que llegan desde Cataluña. Ellos “quieren lo mismo”.
Ayer fue un día agitado en la Comunidad de Madrid. Ángel Garrido en un intento desesperado por acabar con las protestas antes de que los Reyes acudan a inaugurar FITUR, dejó la pelota en el tejado de los Ayuntamientos diciendo que debían ser ellos quienes regulasen el uso de las VTC.
No fue suficiente. La última reunión, bien entrada la noche, terminó con los taxistas abandonando la mesa de negociaciones…
Y todo esto, ¿cómo puede afectar a la movilidad?
Sin ánimo de entrar en quién tiene razón en el conflicto, sí nos hemos preguntado: ¿cómo afectarán todos estos cambios a la movilidad urbana?
Dejando a un lado todos los trastornos que los conflictos actuales suponen para la movilidad, nos planteamos la pregunta en un futuro cercano.
Plataformas como Uber y Cabify se han convertido ya en elementos habituales del decorado de la movilidad en las ciudades.
Los usuarios incluyen el uso de vehículos de VTC entre las opciones de movilidad urbana, junto al transporte público (taxi incluido) y los vehículos de movilidad compartida (carsharing, motosharing…). De manera que su eliminación de la ecuación supondría una merma en las alternativas de movilidad en las ciudades.
No hay que olvidar que los vehículos de VTC cumplen la normativa para acceder a zonas de tráfico restringido, como Madrid Central, por lo que son una solución a aquellos conductores que quieren acceder al centro de las capitales y no tienen un vehículos adecuados. Además de que algunas ofrecen la posibilidad de elegir un coche eléctrico como medio de transporte.
Queda entonces por ver si, de cumplirse la amenaza de desaparición de Uber y Cabify, los usuarios de las plataformas retomarán el uso del vehículo particular, lo que en poco tiempo, podría dar lugar a un repunte de los índices de contaminación.
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Periodista de cuándo se maquetaba con tipómetro (no, no hace tanto...). Toda una vida dedicada a escribir sobre cómo la movilidad cambia (para bien) la vida de las personas. Ahora, con enchufe