Ford acaba de dar a conocer un vídeo sobre las posibilidades del nuevo prototipo de la pick up eléctrica F-150. Toda una declaración de intenciones sobre las aptitudes de la versión eléctrica: resistencia, potencia e innovación.
El vídeo también es una manera de llamar la atención sobre la nueva generación del exitoso modelo. Además, y como nota simpática, la marca añade una nota a pie de página:
“El prototipo totalmente eléctrico de la F-150 está remolcando mucho más allá de la potencia publicada de cualquier modelo fabricado en serie en una breve demostración durante un evento único. Nunca remolque más allá de la capacidad de remolque de su vehículo. Consulte siempre el manual del usuario”.
Curioso, ¿no?
Poco es lo que sabemos, de momento, de la versión eléctrica de la pick-up Ford F-150. Sólo que es capaz de remolcar 10 vagones de tren de dos pisos y 42 unidades de F-150 de 2019. En total, un peso de más de medio millón de kilos.
Asimismo, que durante 2020 estará en el mercado la versión híbrida y, poco después, la eléctrica.
Pick-up, un esbozo del pasado
Es innegable que existe una batalla por conseguir la pick-up que continúe el éxito de las Series F de Ford. Nacieron como vehículo de trabajo tras la Segunda Guerra Mundial en Estados Unidos. Tan fácil como acoplar una caja al chasis de un vehículo con cabina. En EEUU el éxito fue rotundo. Y de vehículo de trabajo se fue convirtiendo en algo más. Se fue sofisticando su cabina, fue haciéndose más cómodo, su equipamiento fue aumentando.
A partir de los años 80, Ford fue ofreciendo vehículos pick-up lujosos, pero con tanto éxito como sus hermanos más sencillos. De hecho, EEUU es un país enamorado de las pick-ups y, a pesar de los aparatosas que puedan parecernos, allí encajan sin problemas.
Si a nivel mundial Ford vende más de un millón de estos vehículos, un modelo eléctrico es imprescindible. Pero también tiene su hándicap. Como ejemplo, hablando del Ford F-150 Limited, americano, diremos que lleva un motor 3.5 V6 EcoBoost twin-turbo. Su potencia es de 375 CV y un par máximo de 637 Nm a sólo 3.500 rpm. Y eso es mucha potencia y un gran par.
Quizás sus aptitudes off-road se vean un poco limitadas por su gran tamaño. En concreto, 5,8 metros por más de dos metros de ancho. Pero se desenvuelve bien en un país como Estados Unidos y su capacidad de carga y remolque son muy buenas.
F-150 eléctrica
Por ello, la lucha por conseguir la pick-up eléctrica que mantenga el éxito de Ford es una meta para otros fabricantes. Tal es el caso de Tesla o Rivian. Sin embargo, hace poco hablábamos de un acuerdo al que había llegado la start-up estadounidense de vehículos eléctricos de “aventura”, Rivian, y Ford Motor Company. Comentábamos que Ford iba a invertir en Rivian 500 millones de dólares y utilizaría su plataforma para fabricar vehículos eléctricos. ¿Un rival menos?
Y puede que a eso se deba un poco el vídeo que vemos. Es una forma de fomentar el interés del futuro cliente, demostrando que ya está en marcha la siguiente generación de pick-ups de Ford en eléctrico. Eso, después de que salga la versión híbrida el año que viene en Estados Unidos, eso sí.