La industria automotriz ha felicitado el acuerdo firmado entre la Unión Europea y el Reino Unido. Finalmente, Reino Unido no saldrá de la UE con una ruptura violenta. ACEA, la asociación de la industria automotriz europea, ha señalado que el acuerdo permitirá al sector evitar el efecto “catastrófico” de un Brexit caótico.
El acuerdo permitirá el comercio libre de aranceles y cuotas de bienes después del 31 de diciembre. Eso sí, no se aplicará a la industria de servicios, alrededor del 80% de la economía del Reino Unido, ni al sector de servicios financieros.
Así, finaliza la incertidumbre que comenzó para los fabricantes de automóviles cuando UK votó a favor de abandonar la UE en 2016. Nissan, Toyota y Honda, que fabrican colectivamente casi la mitad de los automóviles producidos en el Reino Unido, habían alertado sobre el tema. Si no había acuerdo y se establecían barreras comerciales, advirtieron, tendrían que abandonar UK. La falta de rentabilidad haría inevitable el fin de sus operaciones en el país.
La industria automotriz y el Brexit
Hace ya tiempo, la SMMT (Sociedad de Fabricantes y Comerciantes de Motor) británica envió una carta al primer ministro, Boris Johnson, pidiendo el acuerdo. Lo comentamos en su momento. Dicha carta indicaba que:
“Un Brexit sin acuerdo es una amenaza existencial para la industria automotriz británica. Los costes arancelarios y las alteraciones podrían amenazar la producción, además de socavar la confianza de los inversores internacionales”.
Ahora, el acuerdo tranquiliza a la industria automotriz británica y a la europea, a pesar de que se esperan los detalles con cautela.
ACEA ha explicado que no puede hacer una evaluación completa de las implicaciones del acuerdo hasta que todos los detalles técnicos se hayan hecho públicos:
“Sólo en ese momento estará claro si el acuerdo refleja plenamente los intereses de los fabricantes de automóviles de la UE y sus cadenas de suministro”.
Aún quedan grandes desafíos por delante porque el comercio de mercancías se verá muy afectado por las barreras al comercio debido a los nuevos aranceles. Entrarán en vigor el próximo 1 de enero.
La salida de UK
Una de las normas establecidas ahora es que el Reino Unido tendrá que certificar el origen de sus exportaciones a la UE. Sólo los productos que contienen una cantidad suficiente de componentes fabricados en Reino Unido o en la UE podrán contar con la tarifa cero acordada. Es un punto importante para la industria automotriz, cuyo efecto se verá con el tiempo.
Es decir, que sólo un producto contará con aranceles si más del 40% de su valor pre-acabado no es de origen británico o de un país fuera de la UE. Es lo que recogen Automotive News Europe y The Guardian.
Reino Unido no logró un acuerdo para incluir algunos países como Japón y Turquía, con quienes el Reino Unido y la UE tienen acuerdos comerciales. Los productos de esos países, entre otros, no se contabilizarán como aportaciones británicas.
La SMMT ha pedido un período de introducción gradual para permitir que las empresas se adapten a las nuevas reglas. Mike Hawes, CEO de SMMT, ha dicho en un comunicado:
“Esperamos los detalles para garantizar que este acuerdo funcione para todos los bienes y tecnologías automotrices, incluidos los detalles sobre las reglas de origen y la cooperación regulatoria futura”.
Por su parte, CLEPA, (La Asociación Europea de Proveedores de Automoción) ha dicho que el acuerdo evita lo que habría sido el peor de los casos para los fabricantes de repuestos. Sin embargo, significará la reactivación de numerosas barreras comerciales.