Un informe publicad por Siemens Financial Services (SFS) estima la densidad actual de cargadores públicos de vehículos eléctricos (VE) públicos en varios países y regiones. La conclusión, a nivel mundial es la misma: hay países en los que más y otros en los que menos pero, en general, faltan cargadores
Recoge la investigación de
SFS que
las ventas mundiales de vehículos eléctricos han aumentado en un 55% durante el último año, pero la infraestructura pública de carga se ha quedado atrás. Prosigue asegurando que para conseguir que la infraestructura esté a la altura y cumplir ambiciosos objetivos de cero emisiones netas mundiales, se necesitarán grandes inversiones de capital.
La entidad defiende también que la financiación inteligente puede ayudar a acelerar el despliegue de cargadores de VE y hacerlos accesibles.
Solo China alcanza objetivos
La densidad de la infraestructura de recarga se calcula en proporción a la flota de vehículos eléctricos, de acuerdo con la siguiente fórmula: número de cargadores públicos dividido entre el número de vehículos en circulación y según los cargadores por kilómetro de vía principal.
En casi todas las regiones estudiadas, la relación entre la infraestructura de carga disponible para el público y el número de VE en circulación, o en comparación con la propia infraestructura viaria, es “preocupantemente baja”.
Parece que solamente China ha hecho inversiones importantes en redes públicas de carga de VE. En comparación, algunas naciones europeas, como el Reino Unido, Francia, Alemania o España, no llegan ni a la mitad de la tasa de implementación del país oriental.
Leasing de cargadores como solución
Para afrontar la creciente brecha entre el desarrollo del mercado de VE y la ausencia actual de infraestructura pública necesaria, el informe señala la creciente atención a nuevos modelos de financiación por el sector privado basados en utilización, prestaciones o resultados.
“Tales modelos de financiación, ofrecidos por financieras especializadas, como SFS, van desde acuerdos basados en leasing, que ayudan a gestionar el flujo de caja, hasta acuerdos más sofisticados basados en la utilización, que posibilitan métodos X como servicio para acceder a tecnologías de carga de VE”, afirman los autores del informe.
“Independientemente de la estructura, esos modelos se han diseñado para facilitar inversiones con pagos regulares gestionables que puedan adaptarse a los ingresos esperados generados por los puntos de carga y que, en ciertos casos, puedan lograr que la inversión se haga con presupuesto neutro”, añaden.
Imagen portada: Dephosit Fotos
Periodista de cuándo se maquetaba con tipómetro (no, no hace tanto...). Toda una vida dedicada a escribir sobre cómo la movilidad cambia (para bien) la vida de las personas. Ahora, con enchufe