Los estudiantes del IED (Istituto Europeo di Design) han presentado el A4810 (A4810 Project by IED), su nuevo concept-car creado en colaboración con Alpine. Es un superdeportivo biplaza impulsado por hidrógeno. Con este prototipo, Alpine abre el camino a una nueva generación de diseñadores y conductores.
Han sido 28 los estudiantes del programa de máster en Diseño de Transporte del Istituto Europeo di Design (Italia) que presentaron su visión del A4810. Además, procedían de numerosos países, incluso de España.
Los estudiantes partían de un cuaderno de cargas facilitado por el equipo de diseño de Alpine. El coche es un prototipo que adopta tecnología de última generación. Sin embargo, no olvida la personalidad propia de la marca francesa fundada en 1955.
A4810 Project by IED
Alpine, la marca del Grupo Renault, propuso a los estudiantes que diseñaran un superdeportivo para el 2035, con gran rendimiento, tanto deportivo como medioambiental. Tras recibir el encargo el pasado otoño, los estudiantes trabajaron de forma independiente antes de presentar su interpretación a la marca. Alpine seleccionó entonces dos ideas para combinarlas.
A partir de las dos propuestas seleccionadas, los jóvenes diseñadores crearon el ‘A4810 Project by IED’. El resultado: un concept-car ligero, potente y ágil.
También eligieron un nombre que refleja la herencia de la marca. De hecho, ‘4810’ es la altitud, en metros, del Mont Blanc. Este emblemático pico, el más alto de los Alpes, está situado en la frontera entre Italia y Francia, como un puente que une el IED y la marca Alpine.
El A4810 mide 5.091 mm largo, por 2.010 mm de ancho y 1.055 mm de alto, contando con una distancia entre ejes de 2.717 mm.
Mientras que el motor y los depósitos de combustible están diseñados como los de un hipercoche, el proceso de modelado es una innovación incluso mayor. La silueta alterna entre líneas completas y finas, lo que confiere al vehículo una cierta ligereza, así como elementos aerodinámicos inspirados en la Fórmula 1.
La pintura bicolor, el negro mate y los detalles de fibra de carbono contrastan con los distintos elementos del coche y subrayan sutilmente sus funciones: aerodinámica, mecánica y de forma.
Los estudiantes del equipo de diseño utilizaron herramientas digitales para diseñar el interior con bocetos, modelos 3D, renders, animaciones, así como HMI (interfaz hombre-máquina).
Además, al incorporar la tecnología del hidrógeno, han desarrollado un concepto completo y futurista.
Así fueron las cosas
Raphaël Linari, jefe de Diseño en Alpine, explica las exigencias previas:
“Interpretad los códigos de diseño de Alpine y trasladadlos al futuro diseñando la ‘super berlinetta’ de 2035. Este supercar biplaza deberá plantearse para ser tan eficaz en el plano deportivo como medioambiental. Estará dotado de una motorización de hidrógeno y deberá respetar el espíritu de los modelos Alpine: ligereza, deportividad, placer de conducción. ¡Tenéis cinco meses!”.
Los estudiantes se pusieron manos a la obra. La cuestión era no sólo proponía dibujar este concept-car futurista sobre el papel y en pantalla; igualmente, se debía realizar la maqueta física y a escala real. El objetivo original era, como lo hace cada año cada promoción de la escuela, presentar el resultado en el Salón del Automóvil de Ginebra.
Desafortunadamente, el salón de 2022 se canceló, lo que no impidió que los estudiantes llevaran a cabo la presentación de su proyecto. Así pues, el “A4810 Project by IED” se desveló hace unos días, con ocasión de una conferencia de prensa organizada en la escuela.
Los estudiantes que asumieron la tarea lo hicieron sin tener que enfrentarse a ningún problema de ingeniería o de fabricación: solo las principales cotas del vehículo estaban establecidas de antemano (longitud, altura, anchura y dimensiones de los neumáticos). Raphaël describe el ejercicio de manera gráfica:
“Estas cotas correspondían a las de un superdeportivo. Eran, para los estudiantes, una especie de caja en la que había que situar al conductor, los asientos, la motorización y, sobre todo, imaginar las proporciones del vehículo”.
El prototipo del A4810 final
Después de la fase teórica, hubo que pasar a la práctica y lanzarse en la realización física del concept-car. Durante este periodo, las conversaciones entre Raphaël Linari, los estudiantes y los profesores del IED fueron constantes.
Los estudiantes trabajaron con empeño y sus profesores recurrieron a sus contactos para encontrar a los socios necesarios para la realización del proyecto. Concretamente para fresado, modelado, pintura, etc.; así como con los proveedores para las llantas (OZ Racing) y los neumáticos (Pirelli).
Con este proyecto, Alpine se abre también a una nueva generación de diseñadores. Aunque las colaboraciones con escuelas no son nada nuevo para la marca, esta ha permitido a Raphaël Linari y Antony Villain descubrir todo un vivero de talentos.