Tras el anuncio de su nueva política arancelaria para blindarse de la llegada masiva de coches eléctricos chinos, Europa ha estado en boca de todos en los últimos días. La nueva política pretende proteger a la industria comunitaria, pero hay otro aspecto que la Unión Europea debe cuidar: la infraestructura de recarga.
Así lo apunta ACEA, la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles, que en su último informe pone de manifiesto la lentitud del ritmo de implantación de cargadores en Europa, sobre todo de aquellos con potencias superiores a 22 kW. Este tipo de cargadores, que funcionan en corriente continua (CC), están diseñados para proporcionar cargas de forma rápida y es por ello que, a menudo, se encuentran a lo largo de autopistas principales.
Por otro lado, los cargadores con potencias más bajas, que funcionan en corriente alterna, se encuentran en áreas públicas, instalaciones de ocio, edificios empresariales y en los hogares.
Hay un problema con los cargadores en Europa
Pues bien, el informe de ACEA apunta que, del total de 630.000 puntos de recarga con los que cuenta actualmente la UE. De este total, siete de cada ocho son cargadores con potencias inferiores a 22 kW. Solo el 13,5% del total corresponde a puntos de carga rápida en CC.
Se trata de un dato muy desalentador para aquellos usuarios que estén pensando en pasarse a la movilidad eléctrica, ya que fomenta la conocida ansiedad por la autonomía. En este sentido, Sigrid de Vries, directora general de ACEA, señala que la facilidad para cargar un coche es clave para convencer a los europeos de que se pasen a la movilidad limpia. Para ello, se debe contar con muchos más cargadores rápidos en los que el proceso de recarga sea ágil.
Los países con más y menos puntos de carga
Según datos de ACEA, Países Bajos, Francia y Alemania, que juntos cubren más del 20% de la superficie de la UE, albergan el 61% de todos los puntos de recarga en el bloque comunitario.
Por su parte, el 39% restante se distribuye entre los demás 24 miembros, cubriendo casi el 80% de la región.
En este sentido, los Países Bajos se colocan en la primera posición en número de cargadores en Europa, con 144.453 unidades. Para poner en contexto: se trata de una cantidad 52 veces mayor a la de cargadores que hay en Rumanía, pese a que el país del este es siete veces más grande.
Otro de los puntos que señala el informe es que existe una relación directa entre la disponibilidad de puntos de recarga públicos y las ventas de vehículos eléctricos. Así, Alemania, Países Bajos, Francia y Bélgica, que están entre los países con más ventas, también cuentan con una infraestructura de recarga signicativa.
En el caso de España, contamos con una cuota de vehículos eléctricos del 5,4% y tenemos un total de 30.385 puntos de recarga repartidos en nuestro territorio.
Los países con mayor cantidad de cargadores en Europa son los siguientes:
- Países Bajos (144.453)
- Alemania (120.625)
- Francia (119.255)
- Bélgica (44.363)
- Italia (41.114)
A la cola de la Unión Europea en materia de cargadores encontramos a:
- Croacia (1.074)
- Estonia (683)
- Letonia (535)
- Chipre (329)
- Malta (101)
Te puede interesar