Ampliamos horizontes para ver qué hacen otros países en lo que a ayudas a la compra de vehículos eficientes se refiere. Hemos cogido 10 países de dentro y fuera de Europa para ver cuáles son sus planes de incentivos a la movilidad sostenible
Alemania, centrada en los puntos de carga
El país germano es líder en fabricación y ventas de coches. No en vano es cuna de algunas de las marcas más deseadas como BMW, Audi o Mercedes. Pero, por esa misma razón, es uno de los países europeos que más duro tiene que luchar contra la mentalidad petrolhead.
En Alemania, los planes para incentivar la movilidad sostenible se remontan a 2016.
La compra de un vehículo eléctrico está subvencionada con un máximo de 4.000 euros; mientras que quienes adquieran un híbrido enchufable consiguen un descuento en la factura que puede llegar a los 3.000 euros. Solo hay un requisito: que el modelo elegido cueste menos de 60.000 euros (un límite que permite comprar un Tesla Model 3 con descuento).
Además, los usuarios de un VE están exentos del pago del impuesto de circulación anual (algo así como nuestro numerito); sí lo pagan los híbridos.
Pero en lo que el gobierno alemán ha puesto el énfasis ha sido en la creación de una red de carga extensa, para lo que ha destinado un presupuesto de 300 millones de euros.
China, recortando las ayudas
Resulta sorprendente (como poco) que un país que promueve tanto la movilidad eléctrica y que es el primero en los ranking de ventas de enchufables esté prohibiendo las ayudas.
Un ejemplo: antes las subvenciones a la compra de enchufables eran de 6.000 euros, con la condición de que llegaran a 150 km de autonomía. Ahora son de poco más de 2.000 euros, siempre y cuando puedan recorrer al menos 250 km en modo puramente eléctrico.
Sí se mantiene la exención del pago del impuesto de adquisición, de momento, hasta 2020.
Estados Unidos, mucha variedad
En un país tan grande como Estados Unidos se entiende que haya disparidad de normas.
A nivel federal conceden créditos de hasta 7.500 dólares, pero están limitados a las 200 primeras unidades de cada marca.
Francia, ayudas de hasta 6.000 euros
Nuestros vecinos se han propuesto llegar al millón de vehículos eléctricos en circulación para 2022. Para ello ofrecen descuentos de hasta 6.000 euros para quienes compren un vehículo eléctrico puro (los PHEV no tienen ayuda).
La cantidad a percibir aumenta si se entrega un usado contaminante a cambio.
Dependiendo de la región, en Francia los eléctricos no pagan impuesto de matriculación o tienen descuento. Además, pueden circular por carriles especiales, acceder a zonas de tráfico restringido y aparcar sin pagar en zonas no gratuitas.
Italia premia el achatarramiento
Los planes de ayudas de Italia muestran un el interés del gobierno por rejuvenecer su parque móvil. Esto explica que si se entrega un usado las subvenciones pueden llegar hasta 6.000 euros, mientras que quienes no lo hacen reciben entre 1.500 y 4.000 euros.
Otra medida libera del pago del impuesto de adquisición a quienes compran un vehículo con emisiones inferiores a 161 g/km. Y algunas regiones permiten estacionar de forma gratuita en zonas de pago a los VE.
Japón, de los pioneros
En Japón, las ayudas a la compra de vehículos eficientes son una realidad desde 2009. No da descuentos, sino exención de entre el 20% y el 100% en el impuesto de matriculación. Destaca también por su red de carga: según un informe de Nissan, en 2016 había más estaciones de carga que gasolineras.
Su objetivo es que en 2050 solo se vendan coches híbridos o eléctricos.
Noruega, siempre el referente
En Noruega resulta más rentable comprar un vehículo eléctrico que uno de combustión, tanto por los descuentos como por la menor tasa impositiva. Los cero emisiones no pagan IVA, ni impuesto de matriculación, ni de circulación.
Tampoco hacen frente al pago de peajes, parkings públicos… Además tienen libre circulación en carriles especiales y una amplia red de cargadores gratuitos.
Portugal, con empresa pública
Nuestros vecinos están entre los cinco países europeos con mayor cuota de mercado de vehículos eficientes. Para llegar a esa posición cuentan con una activa política de promoción de energías alternativas, entre las que merece mención destacada la creación de una empresa pública, Mobi.E, para promover la movilidad eléctrica.
Los vehículos cien por cien eléctricos que se matriculan en el país luso están exentos del impuesto sobre vehículos; mientras que los híbridos enchufables tienen un descuento del 75%.
Algunas ciudades como Lisboa no cobran por el uso de parkings públicos.
Suecia, ambicioso objetivo
En Suecia se han propuesto reducir hasta en un 80% sus emisiones contaminantes en 2030 con respecto a las cifras de 2010. Para conseguirlo, el Gobierno da bonos a los coches de bajas emisiones que llegan a los 5.750 euros para los VE y a 960 euros para los híbridos enchufables.
Los vehículos poco contaminantes están libres del pago del impuesto de circulación durante cinco años.
También han anunciado que a partir de 2020, las ciudades podrán crear zonas de bajas emisiones. Las restricciones no afectarán a los VE.
Periodista de cuándo se maquetaba con tipómetro (no, no hace tanto...). Toda una vida dedicada a escribir sobre cómo la movilidad cambia (para bien) la vida de las personas. Ahora, con enchufe