Ami One Concept ilustra la visión de la libertad en la ciudad “by Citroën” expresada por #LibertyElectriCityMobility. La marca entra así en un nuevo terreno de exploración para su transición energética.
Citroën afirma que quiere liderar la movilidad individual en ciudad. Ami One Concept ha sido imaginado como una alternativa a los transportes colectivos (bus, tranvía, metro). Pero también como una opción a otros medios de transporte individuales, los de 2/3 ruedas (bicicleta, scooter o patinete).
Es un biplaza que se dirige a una clientela urbana, con o sin permiso de conducir. 100% conectado, Ami One Concept se basa en un ecosistema digital desde el desarrollo hasta su utilización.
Así, Citroën propone al cliente una experiencia “a la carta”. La misma integra la presentación en línea, la solicitud de pruebas, la configuración de servicios, la reserva y la entrega. Esta experiencia digital continúa a través de una aplicación específica para la gestión del vehículo y sus trayectos.
Citroën propone fórmulas que van desde el carsharing, a la compra, pasando por el alquiler del Ami One Concept. El objetivo es satisfacer las necesidades de desplazamiento de las personas, según sus modos de uso y de la forma más sencilla. Se puede disponer del producto por un mínimo de 5 minutos, llegando a un alquiler a largo plazo de 5 años.
Para 5 minutos o 5 horas, el vehículo se pone a disposición en un lugar concreto, mediante la oferta de coche compartido operada por la marca Free2Move. Para más tiempo, se puede hacer la reserva desde el site de Citroën Rent&Smile.
Además, y para acompañar esta innovadora experiencia cliente, Citroën ha creado los “Mostradores Ami One”. Se trata de un espacio digital que prefigura lo que podría ser un distribuidor automático en el centro de la ciudad. Así, los clientes pueden informarse sobre el producto y sobre las opciones disponibles. Después, una aplicación móvil toma el relevo cuando el cliente ya dispone del vehículo.
El Ami One Concept
El vehículo es un eléctrico que puede circular hasta 45 km/h y ofrece 100 km de autonomía. Necesita 2 horas para una recarga completa, conectado en un enchufe de recarga público o en un Wallbox. Ami One Concept también se puede enchufar en una toma estándar en casa.
Incorpora su propia identidad sonora, para cumplir la reglamentación europea y alertar a baja velocidad de su presencia. Mide 2,50 metros de longitud, 1,50 de ancho y 1,50 de alto y lleva ruedas de 18’’. Da la impresión de ser ágil y manejable.
El acceso al interior del Ami One Concept se hace vía Smartphone. Su desbloqueo-bloqueo se realiza mediante la lectura del código QR presente en la base de las manillas de las puertas.
Una vez instalada, la persona que conduce sitúa su teléfono en un hueco destinado a tal efecto. El conductor, entonces, puede comenzar la conversación con Ami One Concept. Según la aplicación utilizada, la animación se proyecta sobre la lámina de reflexión en el campo visual del conductor. Es un sistema similar al Head-Up Display. La interfaz hombre-máquina se ha pensado como si se tratara de un asistente personal.
Como curiosidad, incorpora piezas simétricas, derecha-izquierda o en diagonal: bajos de carrocería, aletas, faros diurnos y luces traseras, piezas de empuñadura de puertas o de retrovisores. Las puertas también son idénticas. Eso supone un sentido de apertura diferenciado, antagonista para el conductor, para una mejor accesibilidad, y clásico para el pasajero. Además, su capota se despliega, para hacerlo descapotable.