CATL ha anunciado una nueva plataforma eléctrica, que recibe el nombre de CIIC, con el que asegura que, los eléctricos que la utilicen, lograrán una impresionante autonomía de 1.000 kilómetros. Esta no es la única prestación que promete.
El fabricante chino de baterías CATL, que representó el 37% de las ventas mundiales de baterías para vehículos eléctricos en 2022, continúa desarrollando su bagaje tecnológico con CIIC, (CATL Integrated Intelligent Chassis).
Esta nueva plataforma aúna las baterías, los motores eléctricos y otras unidades del vehículo reduciendo significativamente el coste de producción, el peso del vehículo y el consumo de energía. Además, también consigue ampliar el espacio disponible para los pasajeros en el habitáculo.
El primer modelo que utilizará la plataforma
CATL consiguió en enero al primer socio dispuesto a utilizar su plataforma eléctrica. Se trata del fabricante chino de vehículos eléctricos Hozon Auto, propietario de la marca Neta.
Ambas compañías se asociaron para desarrollar la plataforma juntas y anunciaron que el primer modelo que la integraría se lanzaría en el tercer trimestre de 2024. Hozon Auto mostró interés por la plataforma dado su alto integración entre el coche y el chasis.
No fue hasta el pasado 30 de noviembre cuando CATL avanzó que había alcanzado un alto nivel de desarrollo de la plataforma CIIC.
Las prestaciones de la plataforma de CATL
CATL ha completado las pruebas de invierno de la plataforma en Heihe, en el norte de China, y pruebas de verano en Turpan, también en el país asiático.
Los resultados revelan que la autonomía alcanzada fue de 1.000 kilómetros y la eficiencia del paquete de baterías fue del 75%. Sin embargo, a bajas temperaturas, la autonomía se redujo en un 30%. Respecto al consumo, se consiguieron 10,5 kWh/100 km y, según CATL, la batería admite una potencia de carga con la que se pueden recargar cerca de 300 kilómetros en cinco minutos.
La producción en masa del primer vehículo eléctrico con CIIC comenzará en el tercer trimestre del próximo año y, muy probablemente, se integrará en un vehículo de la marca china Neta.
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Los próximos pasos de CATL
El gigante chino de las baterías es un actor de referencia en el mundo de la movilidad eléctrica y sus avances son mirados con lupa desde todas las partes del globo. Cabe preguntarse si el fabricante pretende desarrollar su propio vehículo y comercializarlo a otras compañías que, simplemente, estampen su logotipo en él.
A la espera de ello, será interesante observar si CATL consigue que más fabricantes de vehículos eléctricos se sumen al proyecto CIIC, ya que la reducción de costes de producción es realmente atractivo. Hay que tener en cuenta que la mayoría de fabricantes cuentan con sus propias plataformas eléctricas. Sin embargo, ¿están todos contentos con ellas?
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