El Mercedes Benz EQC es el primer modelo Mercedes-Benz de la nueva marca de productos y tecnología EQ; combina numerosos detalles avanzados de diseño con los contrastes cromáticos típicos de la marca.
Hay que remontarse al Salón de París de 2016 para recordar el momento en que Mercedes habló por primera vez de la que iba a ser su nueva marca de productos y tecnologías para la movilidad eléctrica: la familia EQ.
Dos años después, ve la luz el primer miembro de la saga EQ, el Mercedes Benz EQC.
El Mercedes EQC es un SUV coupé. Desde la marca aseguran que este modelo “encarna el canon estético del lujo avanzado, tanto en el exterior como en el interior; un canon que resulta de la interacción entre una belleza sin precedentes, la yuxtaposición consciente de elementos digitales y analógicos y la transición continua entre el diseño intuitivo y el diseño físico”.
Sus señas de identidad a nivel estético son: la línea estilizada del techo, el contorno de las ventanillas con línea de cintura baja y el descenso del perfil del techo en la zaga, como rasgo típico de los coupés.
Mercedes Benz EQC, pasamos al interior
El habitáculo del Mercedes Benz EQC es un anticipo del canon estético vanguardista de los futuros vehículos eléctricos. Un ejemplo de ello es el reborde de lamas del tablero de instrumentos, que recuerda a las aletas de refrigeración de un amplificador de alta fidelidad.
El tablero de instrumentos asume la forma de un puesto de conducción centrado en torno al conductor. El perfil en forma de ala típico de Mercedes-Benz tiene proporciones asimétricas y está «recortado» en la zona del conductor. Aquí encontramos uno de los detalles estéticos más destacados del puesto de conducción: una casete de alto brillo con rasgos técnicos que aloja los difusores de ventilación de perfil bajo y lamas en forma de llave en color dorado rosa.
Un eléctrico de 300 kW y 450 kms de autonomía
El Mercedes EQC se mueve gracias a dos motores eléctricos —uno en el eje delantero y otro en el trasero— con una potencia total de 300 kW. El motor eléctrico del eje delantero está optimizado para alcanzar una máxima eficiencia en la gama de carga baja o mediana, mientras que el motor trasero determina el dinamismo de la conducción.
Gracias a una sofisticada estrategia de operación es posible alcanzar una autonomía eléctrica de más que 450 kms según el ciclo normalizado europeo (dato provisional a la espera de homologación bajo el ciclo WLTP).
Una batería de iones de litio con una capacidad energética útil de unos 80 kWh (ciclo normalizado europeo) suministra la electricidad que necesita el vehículo.
Dado que el consumo y la autonomía dependen en gran medida del estilo de conducción, el EQC cuenta con cinco programas de conducción de diferentes características: «COMFORT», «ECO», «MAX RANGE», «SPORT» y un programa adaptable individualmente. También tiene pedal acelerador háptico, que ayuda al conductor a practicar un estilo de conducción económico. El conductor tiene la posibilidad de influir en la potencia de recuperación accionando levas de cambio dispuestas detrás del volante.
El Mercedes EQC ofrece los servicios de Mercedes me, que hacen la movilidad eléctrica más confortable e idónea para la conducción diaria. Al mismo tiempo, el EQC es el símbolo del comienzo de una nueva era de la movilidad en la marca Daimler.
Periodista de cuándo se maquetaba con tipómetro (no, no hace tanto...). Toda una vida dedicada a escribir sobre cómo la movilidad cambia (para bien) la vida de las personas. Ahora, con enchufe