Comentábamos que los puntos de carga e infraestructuras eran uno de los principales problemas que ACEA (Asociación de Constructores Europeos de Automóviles) veía para la penetración en los diferentes mercados del vehículo eléctrico, pero otros datos son tan preocupantes para la asociación como el citado.
De hecho, según ACEA, las reducciones futuras de emisiones de CO2 de los turismos dependerán en gran medida del aumento de las ventas de vehículos con motores de energías alternativas, incluidos los eléctricos, híbridos, de pilas de combustible y de gas natural. Pero añaden que, a pesar de que los fabricantes de automóviles europeos están ampliando la producción de esos modelos, eléctricos sobre todo, la penetración en el mercado de estos vehículos todavía es baja y muy fragmentada en toda la Unión Europea.
Los vehículos de carga eléctrica (VE) representan el 1,5% de las ventas totales de automóviles nuevos en la Unión Europea, con enormes diferencias entre los 28 estados miembros. La asociación indica que la realidad, con respecto a la aceptación de los EV en el mercado, depende de varios factores que escapan al control de los fabricantes de automóviles.
Los datos son significativos: en números absolutos, crecieron las ventas de vehículos eléctricos en la Unión Europea en los últimos años, pero sólo en línea con el crecimiento general de las ventas de automóviles. La cuota de mercado de eléctricos, no obstante, ha permanecido más o menos estable, creciendo sólo 0,9 puntos porcentuales entre 2014 y 2017.
Todo esto indica que, al ritmo actual, la cuota de mercado sería del 3,9% para 2025 y del 5,4% para 2030, lo que hace ver la señal que están enviando los consumidores: todavía hay demasiadas barreras para vehículos con carga eléctrica como para reemplazar a los vehículos con motores de combustión interna.
La conclusión parece evidente: promover las reducciones de CO2 dependerá en gran medida de una mayor venta de vehículos eléctricos y de otras energías alternativas, por lo que estas barreras deben abordarse con urgencia.
Aceptación del mercado, vital para ACEA
El estudio de ACEA establece que la aceptación del mercado de vehículos eléctricos en la UE está directamente relacionada con el PIB per cápita. La asequibilidad es una gran barrera para los clientes.
Así, la cuota de mercado de los VE es prácticamente del 0% en países con un PIB inferior a 18.000 euros; la mitad de los 28 estados miembros de la UE tienen un participación en el mercado de VE de 0,75% o inferior; por el contrario, una cuota de mercado de VE por encima del 1,8% sólo se ve en países con un PIB per cápita de más de 35.000 euros; el 85% de las ventas de vehículos eléctricos se concentran en solo seis países de Europa occidental, países con algunos de los PIB más altos.
Las conclusiones son importantes para ACEA: un impulso forzado a la electrificación podría llevar a la exclusión social de los países con PIB más bajos, reduciendo la movilidad de las personas que más lo necesitan. Estos datos deberían llamar la atención de los responsables de las políticas. Las medidas de descarbonización deberían ser inclusivas en el futuro, sin suponer que todos los países están en la misma posición que un puñado de mercados avanzados, con altos PIB, para lo relacionado con los vehículos eléctricos.
El estudio completo de ACEA.
Pues claro que la renta per cápita influye, pero lo hace más los precios desorbitados (kona 60kwh vale 26000€) más que la versión ICE 120CV.
Que los fabricantes como Renault no cumplan las condiciones de sustitución de batería alquilada (yo llevo 2 años esperando y parece que no tienen intención de fabricar o colocar celdas nuevas en nuestras baterias, por mucho que haya un contrato que les obliga si baja del 75%SOH).
Que sus motores electricos aguanten sólo 15.000km tampoco ayuda (el segundo motor me ha dado el mismo fallo que el primero, tras recorrer sólo 15.000km!). Con 29.600km ya van 2 motores fundidos (fallo electrico a controlar) mientras que las ruedas son todavía las de origen.
Que Renault te de como única solución para tu EV con 5 o 6 años su recompra tirado de precio o te quedas con coche con batería super degradada y fallos en el motor que no quieren solucionar.
Renault está matando al coche eléctrico, al desauciarlo pasada la garantía de 5 años (incluso antes la batería alquilada).
Si un ICE dura 10, 15 o 20 años ( mi último ICE lo vendí con 23 años) y un EV sólo 5, aunque se vendiesen el triple que ICE seguirian siendo minoría.
No compren Renault EV. Son incimplidores y sus fallos de diseño no los corrigen con OTS.
Las subvenciones que cogieron por vender fluences ze deberian devolverlas si como parece están achatarrando estos con 5 o 6 años como única solución para los propietarios. ¿Que nadie en Europa ve este escándalo?