El radar situado en la parte delantera del Model S y del Model X se utiliza ahora en la versión 8.0 del Autopilot de Tesla para detectar obstáculos y vehículos incluso delante del coche que les precede.
El radar, protagonista del Autopilot 8.0
La nueva versión del software de Tesla incorpora el uso del radar, suministrado por Bosch, que anteriormente se utilizaba como un sensor secundario para el procesamiento de las imágenes de la cámara.
Ahora ese radar se ha convertido en el auténtico protagonista del sistema. Realiza las funciones que anteriormente se realizaban con la cámara frontal. Es capaz de ver más de un carril y más allá del coche que circula por delante incluso en las peores condiciones meteorológicas.
Esta es la diferencia fundamental que aporta la nueva versión del software del Model S. En este punto es importante resaltar como, sin tocar el coche en ningún taller, Tesla puede variar su funcionamiento modificando el software.
Las funciones de la versión 8.0 del Autopilot de Tesla
Control de velocidad, Autosteer, vigilancia de obstáculos delanteros
En el vídeo que incluimos en este artículo podemos ver el Autopilot en funcionamiento. El control de velocidad activo es capaz de mantener la velocidad que se le indique como consigna mientras no le preceda ningún vehículo. En ese caso se mantendrá detrás de él.
En caso de pulsar la palanca del intermitente el coche realiza la maniobra de adelantamiento puesto que es capaz de advertir la presencia de vehículos en los carriles paralelos.
También detecta las líneas del carril y mantiene el coche dentro de él (Autosteer), moviendo el volante cuando se introduce en una curva. En este caso no vemos que el coche se ‘balancee’ de lado a lado como ocurre en otros sistemas de mantenimiento del carril.
Según Tesla sí existe un movimiento dentro del carril. Cuando detecta que, en paralelo, otro vehículo se acerca se produce un movimiento hacia el lado contrario para aumentar la seguridad de la marcha.
También vemos como, efectivamente, es capaz de detectar la presencia de varios coches por delante. Una función que aumenta la seguridad en la circulación puesto que ya sabe lo que ocurre más allá de lo que el conductor ve desde detrás del volante.
El Autopilot, a pesar del nombre que se le ha dado, no es un sistema de conducción autónoma sino un sistema de ayuda al conductor para mejorar su seguridad. Por eso mantiene los avisos para que el conductor no suelte el volante durante mucho tiempo.
En la versión 8.0 son más insistentes y el icono del volante que se utiliza para avisar al conductor se pone de color rojo en los avisos finales. El software ahora ‘castiga’ a los conductores que no hacen caso de estos avisos inhabilitando el sistema hasta la próxima vez que se pone el coche en marcha (o que se selecciona la posición D).
Video: Youtube (Bjørn Nyland)
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.