El Opel Mokka-e es el segundo modelo cien por cien eléctrico de Opel, tras el Opel Corsa-e. Estamos ante la versión eléctrica de uno de los tres modelos que el fabricante alemán tiene en el mercado de los SUV (Opel Mokka, Opel Crossland y Opel Grandland, del que hay versión híbrido enchufable, el Opel Grandland PHEV).
La versión eléctrica del Opel Mokka llega con la segunda generación de este todocamino del segmento B. Desarrollado sobre la plataforma e-CMP del grupo PSA (igual que el DS 3 Crossback E-TENSE, por ejemplo), tiene también inspiración del Opel GT X Experimental, como el Opel Vizor (módulo frontal que integra los faros y la parrilla carenada).
También son parte de sus señas de identidad la carrocería bicolor, donde el techo y el capó pintados en negro contrastan con el resto del cuerpo (disponible en verde, rojo, gris, negro y azul). La separación del techo se marca tanto visual como físicamente por una línea cromada. Las llantas pueden ser hasta 18 pulgadas.
El Opel Mokka-e crece 12,5 cms con respecto a su antecesor con lo que a los 4,15 metros de largo; en su interior viajan cinco personas; el maletero tiene 350 litros de capacidad.
Otra de las novedades de la marca que tienen cabida en el Mokka eléctrico es el Opel Pure Panel, formado por dos pantallas unidas por el mismo marco: una tiene 12 pulgadas y ejerce de instrumentación digital; la otra, es de siete pulgadas y da acceso a los sistemas Multimedia Radio y Multimedia Navi (como opción puede llegar a las 10 pulgadas y controla el sistema Multimedia Navi Pro).
En cuanto al equipamiento, destacan los faros matriciales IntelliLux LED, el control de crucero adaptativo, el sistema de mantenimiento de carril, el reconocimiento de señales de tráfico, el cargador inalámbrico para smartphones, la cámara trasera de 180 grados, los asientos ergonómicos de seis posiciones, la tapicería en Alcántara o en cuero, el asiento del conductor con calefacción y masaje…
Mecánica
Bajó el capó el Opel Mokka-e tiene un motor eléctrico de 136 CV (100 kW) y 260 Nm de par. Se alimenta de un paquete de baterías de 50 kWh, con refrigeración líquida y celdas CATL. La autonomía, homologa en ciclo WLTP, es de 335 km. Alcanza una velocidad máxima de 150 km/h.
En corriente alterna, el Mokka-e puede cargar a un máximo de 11 kW; también admite carga continua a un máximo de 100 kW, opción que le permite recuperar un 80% de su autonomía en apenas 30 minutos.
El conductor del Mokka-e puede elegir tres modos de conducción: Normal, Eco y Sport. Con cada uno, se modifica la respuesta del acelerador, el nivel de asistencia de la dirección y la gestión de la refrigeración. El modo Sport maximiza el dinamismo, el modo ECO aumenta la eficiencia y el modo Normal ofrece un polivalente equilibrio en este innovador SUV eléctrico.
Precios
El Mokka eléctrico está disponible desde 34.900 euros en su versión más básica, aunque este precio puede variar según el Mokka elegido: Edition, GS Line, Business Elegance y Ultimate.
La batería cuenta con ocho años o 160.000 km de garantía.
