Mitsubishi i-MiEV
El i-Miev completa el trío de coches desarrollados sobre la misma plataforma del grupo PSA, junto con el Peugeot iOn y el Citroën C-Zero. Como estos, es un utilitario urbano que mide 3.475 mm de largo, 1.475 mm de ancho y 1.608 mm de alto y tiene una capacidad de carga del maletero es de 166 litros.
El i-MiEV es un coche que queda ya algo anticuado. La última tanda de mejoras tuvo lugar a finales de 2014. Entonces sí fue un gran salto hacia adelante, con detalles en el exterior, una optimización del motor eléctrico, nuevo equipamiento y el anuncio de un importante retoque en el precio.
Más de lo que te esperas
El Mitsubishi i-MiEV pertenece a la primera horneada de coches eléctricos en los que se buscaba minimizar el impacto económico en todos los sentidos. La idea era utilizar materiales y equipamiento sin muchos alardes para compensar el elevado coste que todavía tenían las baterías.
Con la renovación de 2015 (la versión que está en los concesionarios), mejora bastante. Los faros son de LED, de manera que ofrecen una iluminación más intensa con un menor consumo de electricidad. Monta asientos calefactables, que aunque ya lo eran en la primera generación, en este tienen una zona de calor más extensa.
Como parte del equipamiento tecnológico incorpora sistema de monitorización de la presión de los neumáticos (TPMS); también función de iluminación de frenada regenerativa (hace que cuando el vehículo está regenerando de forma importante, se iluminen las luces de freno posteriores para avisar al resto de conductores y evitar que se produzca un choque en la parte posterior); y un aviso acústico que recuerda que el cable de carga está conectado.
En su interior viajan cuatro personas (sin holguras).
Diseño futurista
Estéticamente es muy similar a los iOn y C-Zero (tanto que no es difícil confundirlos). El i-MiEV destaca por sus formas redondeadas, su amplia distancia entre ejes, sus voladizos cortos y sus llantas de aleación de 15 pulgadas.
Su hábitat natural son las urbes, donde se mueve sin problemas gracias a su reducido radio de giro.
Así funciona el Mitsubishi i-MiEV
El corazón del i-MiEV es el MiEV OS, que realiza funciones vitales tales como monitorizar el estado de la batería, recuperar la energía mediante la función de frenada regenerativa y garantizar una conducción suave y con toda la potencia necesaria, lo que mejora la seguridad, la comodidad y la eficiencia energética.
El conjunto se mueve gracias a un motor síncrono de imanes permanentes, con 180 Nm de par motor disponibles desde el mismo momento en que se pisa el acelerador. La velocidad máxima es de 130 km/h.
Las baterías se recargan por conexión a la red eléctrica, pero también a través de la frenada regenerativa que se inicia tan pronto se levanta el pie del acelerador, almacenándose la energía cinética en la batería de tracción; cuando se presiona el pedal de freno aumenta la regeneración de energía.
Para la carga convencional, el i-MiEV utiliza una conexión convencional que permite realizar la carga completa en ocho horas desde una toma eléctrica ordinaria. Por otro lado, el i-MiEV dispone de una conexión rápida que permite una carga del 80% en tan sólo 30 minutos en estaciones de carga rápida.
Precios
El Mitsubishi i-MiEV está disponible en única versión que cuesta 30.500 euros.